Bajo la batuta del «marqués» Vicente Del Bosque, bajo la magia del maestro Xavi Hernández, la selección española no solo se coronó ayer campeona de Eurocopa, no solo alcanzó un triplete seguido -Eurocopa, Mundial y Eurocopa-, sino que lo hizo con un fútbol fuera del alcance de cualquier otra selección. Un 4-0 final, un baile, ante una Italia que quiso vender cara su derrota, pero terminó casi humillada.