En una rueda de prensa en Gasteiz, varios colectivos han dado cuenta a la sociedad alavesa de su preocupación «por la gravedad de los hechos» que últimamente están tieniendo lugar en el conjunto de Araba y en especial en su capital.

En concreto, han comparecido representantes de la Plataforma Feminista de Gasteiz, de la Junta de Personal de la Diputación de Araba, del movimiento Transbollomarica de Gasteiz, la Plataforma Antirracista de la capital, la asociación magrebí Al-Indimay y Gora Gasteiz.

Estos grupos consideran que la «irresponsabilidad» de los máximos representantes institucionales de Araba y el partido al que pertenecen, el PP, están propiciando «un clima de conflictividad social cada vez más peligroso» con el «único fin» de obtener réditos electorales.

En ese sentido, se han referido, entre otras cuestiones, a «la campaña ‘Cero Tolerancia’, difundida por el PP utilizando fondos de la Diputación de Araba», de la que han dicho que «no solo es xenófoba, que lo es, también es machista».

«Nos parece indignante que el Partido Popular utilice nuestras instituciones, las de todos y todas, para potenciar su campaña electoral, basada en un discurso xenófobo, machista e incendiario», han criticado.

Según han explicado, se está dando lugar a un «rechazo a la diferencia» que, han dicho, está dejando vislumbrar sus primeras consecuencias, entre las que han citado «agresiones a personas migradas o a quienes defienden sus derechos, aparición de simbología fascista, mensajes amenazantes a asociaciones de personas migradas...»

Han destacado que «la xenofobia creciente en nuestro territorio sí es una realidad a la que atender con campañas de sensibilización y que las instituciones deberían tomar nota de las diferentes iniciativas puestas en marcha por la sociedad civil alavesa».

Por ello, han llamado a la ciudadanía y a las instituciones a trabajar por el respeto de todas las personas, «a velar por ellos y a fomentar una ciudad respetuosa, que garantice los derechos sociales para todas las personas y donde todas podamos convivir sin miedo a ser rechazadas».

Tras destacar el riesgo de que prosiga el «preocupante aumento» de la conflictividad social, han concluido haciendo un llamamiento a la responsabilidad todos los agentes.