Ramon Sola
Donostia

Urkullu confía en las estatales, pero descarta una reforma constitucional

El Consejo de Gobierno de Lakua ha celebrado su primera reunión del curso en Donostia, sin iniciativas nuevas ni aclaraciones en temas sustanciales como el nuevo estatus o Catalunya. Iñigo Urkullu prevé que todo cambiará tras las estatales porque «España tiene un problema», pero descarta una reforma constitucional.

El Gobierno de Lakua al completo, junto al Diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, y el alcalde de Donostia, Eneko Goia. (ARGAZKI PRESS)
El Gobierno de Lakua al completo, junto al Diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, y el alcalde de Donostia, Eneko Goia. (ARGAZKI PRESS)

Un año más, el Gobierno de Lakua ha celebrado un consejo especial en el Palacio de Miramar donostiarra, como punto final al paréntesis veraniego. Tras él, el lehendakari ha comparecido durante más de una hora sin aportar nuevas iniciativas para este curso, último de la legislatura, y dedicándose más bien a analizar qué pueden traer los próximos meses en otros escenarios, especialmente el estatal.

Urkullu entiende que estos comicios, presumiblemente en diciembre, «abrirán un nuevo periodo en las relaciones entre Euskadi y el Estado. Un periodo de asunción de la realidad plurinacional. Un periodo que permitirá afrontar desde la colaboración dos retos de futuro, como son la paz y la convivencia, y un nuevo pacto político para Euskadi».

El lehendakari ha matizado que no hace «especulaciones» sobre si puede producirse un vuelco electoral, pero ve claro que no habrá mayorías absolutas y que esto da opciones de cambios serios porque «España tiene un problema». No obstante, al mismo tiempo ha dejado claro que no contempla la hipótesis de una reforma constitucional, porque ello requeriría un consenso entre PP y PSOE que no prevé.

Así las cosas, las expectativas de Urkullu parecen concretarse más bien en que Madrid abra la puerta a una reforma estatutaria, lo que liga la cuestión a la ponencia de autogobierno que encara su recta final en el Parlamento de Gasteiz. Sobre ella el lehendakari tampoco ha sido concreto, y ni siquiera ha aclarado si Lakua hará finalmente una propuesta. Dice que se atendrá a lo que le pidan los partidos.

En materia de pacificación, Urkullu destaca que su Plan de Paz está alcanzando un gran alto de cumplimiento y remarca también la próxima reunión entre los alcaldes (4 de setiembre) para intentar consensuar actos para el Día de la Memoria (10 de noviembre). Da prioridad así a la cuestión de las víctimas y el pasado.

En otros terrenos, el lehendakari ha citado la incertidumbre económica que se mantiene, con mención para el ejemplo de China, y ha alertado de que la fase de crecimiento que se inicia será «moderada». A nivel general, ha calificado el verano que va concluyendo de «positivo», pero con preocupación por la persistencia de la violencia de género.