ELA ha denunciado la «lotería» que supone la OPE en Osakidetza, ya que «la probabilidad de lograr una plaza para las 50.110 personas que han sido admitidas se reduce al 1,01%, es decir, de cada 100 personas que se presentarán a los exámenes solo una va a conseguir un puesto de trabajo», mientras que, en alguna categoría, como en la de auxiliares de administración, «las opciones se reducen al 0,67%, un autentico escándalo».

Estos datos, en opinión de ELA, «contrastan con los 8.000 puestos de trabajo cubiertos con personal eventual», de forma que Osakidetza «podría ofertar mañana 8.000 puestos de trabajo en la OPE sin crear ningún puesto de trabajo ni aumentar el gasto de personal».

En un comunicado, el sindicato ha asegurado que «estabilizar esos puestos de trabajo ahorra prestaciones sociales que ascienden a alrededor de 20 millones de euros, con los que podrían crearse 400 puestos de trabajo adicionales». «Y todo ello sin gastar un euro. No es una panacea, pero seguro que un 20% de probabilidades de lograr una plaza motiva a estudiar más que un pírrico 1%», ha afirmado.

ELA ha denunciado que «la cicatería llega a proporciones, o desproporciones, inimaginables teniendo en cuenta que la media de edad de Osakidetza supera los 50 años». Según ha advertido, «los próximos 14 años se va a jubilar la mitad de la plantilla actual, y solo en 2016 se prevé la jubilación de 722 personas, en 2017 serán alrededor de 843 y en 2018 serán 966», pero Osakidetza «oferta estabilizar para todo el periodo entre 2011, último año en la que se ofertó una OPE, y 2015, a 507 personas».

Según ha alertado el sindicado, «a este ritmo en 2018 tendremos más de 10.000 personas con contrato eventual cubriendo puestos estructurales en Osakidetza».