«Soy Fermín Rodríguez, hermano de Germán Rodríguez, asesinado por la Policía en 1978. Para mí es un insulto esta exposición. No tienen derecho a hacer una exposición así en Pamplona. Gracias». Con estas palabras se ha dirigido a los medios Fermín Rodríguez antes de entrar a hablar con el Defensor del Pueblo junto con otras víctimas de la violencia policial en Iruñea. En ese encuentro, le han solicitado que medie para que se impida la exposición, ya que la entienden como «una burla». 

«Con esta exposición se está hurgando en nuestro dolor», ha asegurado la hija de Ángel Berrueta, que murió a manos de un policía y su hijo. También han relatado sus testimonios Aingeru Zudaire, que perdió un ojo de un pelotazo hace tres años, y Mikel Iribarren, al que un policía disparó una bomba de humo en la cara dejándole marcas de por vida, para después patearle en el suelo.

Han acudido al acto de repulsa Itxaso Torregrosa, que denunció haber sido víctima de torturas y la hermana de Mikel Castillo. «Mi hermano fue asesinado de un tiro en la espalda por la Policía Nacional», ha denunciado Begoña Castillo para luego recordar que el agente que mató a Mikel Castillo «fue condecorado quince días después».

Piru Zabalza y Karlos Otxoa han aparecido en representación de la plataforma Sanfermines del 78 y Ahaztuak. «Estamos trabajando para sacar a la luz el caso de José Luis Cano, asesinado por la Policía durante la Ley de Amnistía», ha explicado Otxoa, que ha defendido que la violencia policial ha sido algo «sistemático» en Iruñea.

Aitziber Berrueta ha convocado una concentración para el próximo viernes en la Ciudadela, junto a la sala donde el ministro Jorge Fernández Díaz inaugurará esta tarde la exposición. Será a las 19.30 horas.