Domínguez ha explicado que planteará la reversión pública de las cocinas del CHN en una reunión con la Mesa Sectorial (representación sindical) que tendrá lugar la semana que comienza el 22 de febrero y ha recordado que este objetivo aparece recogido en el acuerdo programático suscrito por los cuatro partidos que sostienen al Ejecutivo de Uxue Barkos.

La reversión pública será parcial, ya que afectará al aprovisionamiento y elaboración de los alimentos, mientras que el reparto y la limpieza correrán a cargo de una empresa privada. Para ello, habrá que hacer una nueva licitación, ya que el contrato con Mediterránea de Catering concluye en setiembre. En este proceso, se creará una treintena de puestos de trabajo públicos.

Domínguez ha añadido que todo el proceso está condicionado a la disponibilidad presupuestaria y ha estimando que el sobrecoste respecto al sistema actual serán 700.000 euros anuales. Además, Osasunbidea tendría que comprar las cocinas a Mediterránea de Catering, por una cifra que ha estimado entre 2,5 y 2,8 millones de euros.

Técnicamente, la opción es posible, ya que según ha destacado el consejero, la cocina actual permite elaborar alimentos tanto en caliente como en frío, según el sistema implantado por Mediterránea de Catering. Domínguez ha añadido que la dieta es una parte importante del tratamiento que debe dispensar un centro hospitalario.

La privatización de las cocinas del CHN y su entrega a Mediterránea de Catering provocó gran malestar entre los usuarios del centro hospitalario por la pésima calidad de la comida que se entrega a los enfermos. También los trabajadores denunciaron sus condiciones laborales.