La lehendakari de Nafarroa, Uxue Barkos, ha defendido en Madrid que el Gobierno del cambio de Nafarroa ha permitido una transformación «profunda y serena» gracias al entendimiento de Geroa Bai, EH Bildo, Podemos e I-E.

«Logramos conformar un ejecutivo sin cuotas de partidos, un gobierno de consenso. El objetivo era claro: lograr un ejecutivo cohesionado, el mejor equipo para favorecer la estabilidad y solidez del Gobierno, previniendo las tensiones partidistas que pudiera poner en riesgo la sostenibilidad del Ejecutivo a lo largo de la legislatura», ha señalado en el Forum Europa de Nueva Economía celebrado en Madrid.

Barkos entiende que Nafarroa cuenta con un Gobierno «solido y estable». Las nuevas cuentas públicas marcan para la lehendakari un cambio claro de prioridades y son las áreas sociales las que acaparan la mayor parte del presupuesto. «Hemos conseguido iseñar una política presupuestaria cuyos ejes son garantizar los derechos sociales de los colectivos más desfavorecidos, impulsar la creación de empleo con especial atención a las zonas más castigadas por la crisis y mejorar los servicios públicos».

Así, ha señalado que en estos primeros meses de legislatura ya se ha diseñado «una clara hoja de ruta que articulará el desarrollo económico en los ámbitos de la industria, la internacionalización, nuevas tecnologías e investigación, entre otros. Todo ello a través de 10 planes estratégicos que serán aprobados en los próximos meses».

Barkos defiende las escuelas infantiles en euskara

Por otro lado, Barkos ha defendido el cambio de modelo lingüístico en dos escuelas de Iruñea, con las que el número de escuelas infantiles públicas asciende a cuatro de un total de 17. Aunque ha dicho que comprende las molestias que supondrá para los padres y madres que tendrán que cambiar a sus hijos de escuela por querer una educación en castellano, se ha preguntado «¿dónde está la desproporción para una demanda absolutamente similar?».

«¿Por qué queremos hacer de lo esukera un elemento de enfrentamiento entre navarros?», ha añadido, antes de calificar la situación de «inadmisible». Asimismo, ha subrayado que asuntos como estos deben ser respondidos, «además de con datos y con la realidad, con mucha seriedad desde el primero momento».