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HARARE

El Ejército destituye a Mugabe en plena pugna por la sucesión

El presidente de Zimbabue, Robert Mugabe, se encuentra «encerrado en su casa». Los militares, que también bloquean edificios gubernamentales, han arrestrado a tres de los ministros de Mugabe. Estos movimientos militares se dan en un contexto de pugna por el poder y el propio partido de Mugabe ha anunciado que el nuevo presidente interino es el exvicepresidente Emerson Mnangagwa.

Soldados regulan el tráfico en Harare, capital de Zimbabue. (Jekesai NJIKIZANA/AFP)
Soldados regulan el tráfico en Harare, capital de Zimbabue. (Jekesai NJIKIZANA/AFP)

«La pasada noche, la primera familia fue detenida y sus miembros están seguros. Tanto por la Constitución como por el bien del país, esto era necesario. Ni Zimbabue ni ZANU son propiedad de Mugabe ni de su mujer. Hoy empieza una nueva era y el camarada Mnangagwa nos ayudará a conseguir un Zimbabue mejor», ha asegurado en su cuenta de Twitter el partido gubernamental zimbabuense.

El presidente sudafricano, Jacob Zuma, ha podido hablar con Mugabe, quien le ha confirmado que está «encerrado en su casa» y se encuentra «bien».

La formación política que ha liderado Zimbabue durante las últimas décadas ha subrayado que lo sucedido en las últimas horas «no ha sido un golpe de Estado» sino que ha habido «una decisión de intervenir» porque la Constitución «ha sido socavada». «El camarada interino Emmerson Mnagngawa será el presidente de ZANU PF como establece la Constitución de nuestra organización revolucionaria», ha asegurado el partido hasta este martes liderado por Mugabe.

La formación política zimbabuense ha asegurado, además, que lo que está viviendo el país es una transición «pacífica no sangrienta» y que la situación de Zimbabue es estable. «ZANU PF tiene su forma de solventar nuestros problema. La situación es estable y Zimbabue está abierto a los negocios. No ha habido un golpe de Estado», ha subrayado.

El diario británico ‘The Guardian’ ha informado de que Emmerson Mnangagwa –cuyo reciente cese está en el origen de la grave crisis política que vive desde hace días Zimbabue– ha regresado este miércoles al país en un vuelo procedente de Sudáfrica.

El cese se produjo el 6 de noviembre y esta decisión de Mugabe fue interpretada como un intento de desalojarlo de la carrera sucesoria para que sea la primera dama, Grace Mugabe, la que asuma el poder.

El cese de Mnangagwa provocó un duro pronunciamiento del jefe de Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, el general Constantino Chiwenga, que advirtió el lunes de que el Ejército podría intervenir para frenar la «purga» puesta en marcha por Mugabe para favorecer a la primera dama.

La situación actual en Zimbabue no está clara, después de que el Ejército haya tomado el control de la sede de la cadena de televisión estatal zimbabuense ZBC y haya anunciado que está actuando contra los «criminales» que rodean a Mugabe.

Los soldados, que han bloqueado también edificos gubernamentales, han arrestado a tres ministros de Mugabe: al de Finanzas, Ignatius Chombo, al titular de Educación Superior, Jonathan Moyo, y al de Gobierno Local, Obras Públicas y Vivienda y comisario a nivel nacional de la gobernante Unión Nacional Africana de Zimbabue-Frente Patriótico (ZANU-PF), Saviour Kasukuwere.

Los tres formarían parte del conocido como grupo G40, una facción del partido que, según los expertos, busca expulsar a los veteranos de la guerra de independencia –como Mnangagwa– para allanar el camino de la primera dama, Grace Mugabe, hacia el poder.

También el líder de la Liga Juvenil del partido gubernamental zimbabuense ZANU-PF, Kudzai Chipanga, ha sido arrestado en Harare, un día después de que asegurara que sus seguidores están dispuestos a morir en defensa de Mugabe, según informa la BBC citando medios locales. Grace Mugabe contaría con amplio apoyo entre las juventudes del partido.

Entretanto, la Unión Europea ha admitido preocupación por la situación en Zimbabue y ha pedido respetar el orden constitucional. El ministro de Exteriores británico, Boris Johnson, ha sostenido que no está claro que Mugabe haya caído y ha llamado a la contención.