Existe en el mercado una gran oferta de centros de aprendizaje de idiomas, tanto presenciales como plataformas online, pero no todos ofrecen certificaciones o titulaciones de idiomas reconocidas por organismos internacionales y universidades, o una formación adecuada del profesorado, traduciéndose en una formación de muy escasa calidad. A la hora de elegir hay que tener claros los objetivos básicos: si solo queremos conocer un idioma para “defendernos” por el mundo, o si se necesita la titulación con validez a nivel europeo e internacional, con vistas, por ejemplo, a la solicitud de becas como la de Erasmus.

Con la salvedad de las titulaciones de las escuelas oficiales, para el resto de acreditaciones cada organismo (universidades, centros de estudios, etc.) establece la relación de certificados de los diferentes organismos que considera equivalentes a cada uno de los niveles de competencias que establece el Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas (MCER). Los centros que imparten enseñanzas no oficiales y que publicitan la obtención de titulaciones extranjeras, están obligados a tener un convenio con la entidad extranjera para poder expedir dicha certificación. Si bien algunos de estos certificados gozan de amplio prestigio, en principio carecen de reconocimiento directo en el Estado español, y son reconocidos a nivel individual por cada entidad.

En las escuelas online algunas ni siquiera están radicadas aquí, suponiendo una desventaja para las personas usuarias, al no estar amparadas por nuestra normativa de consumo y no ofrecer una correcta atención al alumnado, ni a sus derechos como personas consumidoras. Recalcar la importancia de estudiar el contrato antes de firmarlo. Los precios que deben aparecer en el contrato han de ser finales (impuestos incluidos), y se debe indicar precio por matrícula y por mensualidades.