Laura Díez García
PANORAMIKA

Miradas cruzadas

La exposición «Extramission: Capturando ojos luminosos», de la cineasta Jessica Sarah Rinland, se puede visitar en Tabakalera hasta el 12 de enero.
La exposición «Extramission: Capturando ojos luminosos», de la cineasta Jessica Sarah Rinland, se puede visitar en Tabakalera hasta el 12 de enero. (Maialen Andres | FOKU)

Cómo generar asombro y curiosidad en las acciones que damos por hecho? ¿Cómo replantearse aquello que realizamos de manera automática? Cuando estos actos son trabajados y filtrados por la artista, se produce una atmósfera de extrañamiento que nos hace preguntarnos sobre el porqué de las cosas que nos vienen dadas. El conocimiento científico es jerárquico y consecuente de su contexto histórico, los objetos de estudio se conservan y clasifican según unas técnicas heredadas que han ido evolucionando. Superponiendo diferentes miradas, podemos ser conscientes de cómo los procesos de conservación y cuidados, a menudo, tienen como trasfondo situaciones de violencia.

La cineasta Jessica Sarah Rinland lleva años reflexionando sobre la conservación museológica y la ecología. En esta ocasión nos invita a un viaje visual y sensorial a través de su instalación, “Extramission: Capturando ojos luminosos”. Esta exposición, presentada en Tabakalera, se puede visitar hasta el 12 de enero y entrelaza de manera magistral la ciencia, la historia natural y el arte contemporáneo, ofreciéndonos una reflexión profunda sobre nuestra relación con el mundo natural. Se trata de la segunda colaboración entre Tabakalera, el Festival Internacional de Cine de Róterdam y Zinemaldia. Rinland trabaja en el cine, la fotografía y las instalaciones multimedia, y en esta obra combina imágenes térmicas, grabaciones de audio y las páginas de la revista “National Geographic” para construir una narrativa visual rica y compleja. El título de la exposición, “Extramission”, hace referencia a una antigua teoría de la visión que proponía que los ojos emitían rayos de luz para percibir el mundo. Esta idea, aunque desacreditada desde el punto de vista científico, sirve a Rinland como una metáfora de la creación artística. Al igual que los ojos emiten luz para dar forma al mundo que vemos, la artista proyecta su mirada sobre la realidad para construir una nueva imagen de ella.

La instalación incluye dos canales de video en blanco y negro, el primero fue grabado en el Museo de Historia Natural de Londres utilizando cámaras térmicas, tecnologías originalmente empleadas en la caza y la vigilancia. Vemos únicamente unas manos que destacan sobre un fondo oscuro y que están restaurando especímenes de animales disecados para su traslado. Rinland vincula el tacto a la visión y nos invita a mirar más allá de lo que podemos ver con nuestros ojos. En el segundo, vemos imágenes grabadas con infrarrojos de una nutria de la Fundación Rewilding Argentina. Se recoge el proceso de reintroducción de especies animales en sus hábitats naturales tras haber sido mantenidas en cautiverio en Europa, y el sonido es grabado aparte en el entorno del laboratorio.

Por otro lado, las proyecciones se acompañan de una serie de imágenes de la revista “National Geographic” que documentan el trabajo del fotógrafo George Shiras III, que desarrolló la cámara trampa para captar imágenes de los animales en su entorno natural. Esta técnica es originalmente indígena y empleaba el fuego para atraer a los animales y cazarlos. Shirin la planteaba como una alternativa a la caza. Todos estos caminos forman parte de un proceso de investigación que, según la artista, apenas está iniciando.