joseba Eizagirre
MOTOR

Nuevos aires en Detroit

El Salón Internacional del Automóvil de Norteamérica (NAIAS) cierra hoy sus puertas después de dos semanas en las que han compartido protagonismo los todoterrenos y los coches deportivos, tanto americanos como asiáticos, toda vez que los fabricantes europeos casi han desaparecido del salón, siguiendo la tendencia de los últimos meses. El salón ha estado marcado también por el anuncio de General Motors de dejar de fabricar en breve coches híbridos para centrarse en los eléctricos, así como por la alianza entre Ford y Volkswagen, que dará lugar al lanzamiento de un primer «pick-up» conjunto en 2022, al que seguirán varias novedades en el segmento de las furgonetas.

Cabe destacar que la cita de Detroit será la última que se celebre en enero, ya que a partir de 2020 volverá a organizarse en el mes de junio, como lo hacía hasta hace tres décadas. Los organizadores confían en que en verano serán capaces de atraer más público, fabricantes y medios de comunicación, y con ello podrán mantener su relevancia frente a otras citas como las de Los Angeles o New York, o incluso el CES, la feria de la electrónica que se celebra cada año en Las Vegas.

En la presente edición se ha desvelado una interesante colección de deportivos, entre los que se encontraba el nuevo Ford Shelby GT 500, el deportivo de calle más potente y rápido de la historia de la marca estadounidense. Diseñado por Ford Performance, monta un bloque sobrealimentado V8 de 5,2 litros que desarrolla más de 700 CV (la cifra exacta aún no ha sido especificada) y se combina con una transmisión automática de doble embrague y siete velocidades que ha sido desarrollada exclusivamente para esta versión.

El Mustang compartía protagonismo con la reedición del mítico Toyota GR Supra, el primer vehículo de calle desarrollado por Toyota Gazoo Racing. Se trata de un deportivo biplaza propulsado por un motor 3.0 con un turbocompresor de doble entrada que desarrolla una potencia de 340 CV y un par de 500 Nm. Acoplado a una transmisión automática de ocho velocidades, y con la función Launch Control, acelera de cero a cien en solo 4,3 segundos y será fabricado en Graz (Austria).

Otros deportivos presentados en el salón han sido el Subaru WRX STi S209, que con sus 346 CV se convierte en el más potente de la marca japonesa, o el Lexus RC F Track Edition, alimentado por un V8 aspirado de 5,0 litros que desarrolla 472 caballos de potencia y que le permite acelerar de cero a cien en menos de 4 segundos.

Junto a los deportivos, el salón de Detroit siempre acoge la presentación de un buen número de camionetas pick-up, tan habituales en las carreteras del país, entre las que destacaba el impresionante Ram Heavy Duty 2019, capaz de cargar con 3,5 toneladas y remolcar casi 16 toneladas de peso, gracias a su motor V8 de 6,4 litros y 416 CV.

También ha habido interesantes novedades entre los SUV, como el Ford Explorer, que pese a su mayor tamaño, adopta una imagen más estilizada y deportiva, al tiempo que logra reducir su peso en 51 kilos. Dispondrá de una plataforma de propulsión trasera y de motores de hasta 370 CV de potencia, no en vano dispondrá de una versión deportiva ST.

En este mismo segmento, también ha concitado la atención del público el elegante Cadillac XT6, con el que la marca norteamericana vuelve al mercado de los SUV de siete plazas, cubriendo el hueco que había hasta ahora entre los XT4 y XT5 y el imponente Escalade. Tendrá un único propulsor, un V6 de 3,6 litros y 310 caballos.

Los asiáticos ocupan el espacio de los europeos. Este año, fabricantes europeos como Audi, Mercedes-Benz, BMW y Porsche no han contado con sus tradicionales pabellones y solo Volkswagen (VW) ha mantenido su lugar en Detroit. El fabricante alemán acudía con la nueva generación del Passat y con la versión GLI del Jetta, que comparte motor con el Golf GTI actual: un TSI de 2,0 litros de al menos 230 CV, asociado a una transmisión automática de doble embrague de seis velocidades.

Así pues, mientras los fabricantes europeos se apartan del NAIAS, parte del espacio que están dejando está siendo aprovechado por los asiáticos, que poco a poco van reforzando su presencia.

Este año destacaba la china GAC, que ha presentado el prototipo Entranze, un futurista crossover eléctrico con forma de bala (Slick Bullet), fabricado con materiales sostenibles y un interior con una nueva disposición de los asientos (2+2+3), inspirada en los aviones. GAC no ha ofrecido demasiados detalles técnicos sobre el modelo, pero según la marca cuenta con unas baterías de litio que le permiten recorrer hasta 595 kilómetros con una sola carga.

El fabricante surcoreano Kia, por su parte, presentaba su modelo más grande hasta la fecha, un SUV medio de hasta ocho plazas diseñado para el mercado americano –el primer Kia desarrollado en exclusiva para Estados Unidos– y llamado Kia Telluride. Monta un bloque de 3,8 litros V6 GDi con una potencia de 295 CV y un par motor máximo de 355 Nm. Va asociado a una transmisión automática de ocho velocidades y a un sistema de tracción a las cuatro ruedas.

Por supuesto, tampoco han faltado los ya habituales prototipos eléctricos, como el Nissan IMs EV Sports Sedan, el Cadillac EV Concept (con el que GM quiere jubilar a los híbridos) o el Infiniti QX Inspiration Concept, el primer paso de la marca japonesa hacia las cero emisiones y que adelanta el que será su futuro SUV eléctrico.