LETICIA ORUE
TENDENCIAS

Nestbox

Si el turismo furgonetero era un valor al alza, este verano lo es más que nunca. Compacto y fácil de instalar, los checos Studio 519 han diseñado un módulo de madera contrachapada llamado Nestbox, que encaja perfectamente en el maletero de un automóvil y se puede expandir en una cama doble y una cocina totalmente equipada para acampar. La unidad, creada para la empresa local Egoé, está disponible en cuatro tamaños y se puede personalizar con módulos que incluyen cocina, mini refrigerador, fregadero y ducha de camping. Durante los viajes en carretera, los diferentes elementos se compactan en una unidad central con respaldo de acero que, como máximo, mide un metro de largo y medio metro de ancho y alto. En reposo, nos permite desplegar un sistema de cajones integrados y unos accesorios plegables que transforman cualquier vehículo en un espacio apto para dormir y cocinar en cuestión de minutos. «Nuestro objetivo principal era lograr un nivel de confort similar al de una autocaravana dentro de los límites de una camioneta», explica el director de Studio 519, Richard Vodička. Para instalar la cama, se despliega un panel de listones que incluye un colchón plegable. La cocina es un gran cajón, que se puede sacar del baúl para proporcionar espacio en el mostrador y acceso a la cocina y al mini refrigerador. El fregadero es plegable también. «Excepto por el lavabo plegable, todo se obtiene localmente y se fabrica en la aldea checa de Bílovice o sus alrededores». Vodička espera que Nestbox pueda ofrecer modos alternativos: «Estamos en medio de un cambio de mentalidad en este momento. Las restricciones globales de viaje han hecho que las personas reconsideren lo que esperan de sus vacaciones y su tiempo libre. Nestbox puede brindar a sus usuarios una sensación de privacidad, seguridad y, sobre todo y más importante, libertad», reflexiona. www.egoe.eu

 

 

Bell Chair

Hay veces en las que ideas revolucionarias se convierten en maldiciones estilísticas y medioambientales. Estamos hablando de las míticas sillas de plástico de terraza. Lo que comenzó como un hito en la historia del diseño con piezas de Verner Panton y Vico Magistretti, que conquistaron el mercado internacional en la década de 1970, se malogró en los 80 debido al diseño de Henry Massonnet. El Fauteuil 300 dio pié a una armada de copias baratas que se expandieron rápidamente por todo el mundo. La falta de sostenibilidad del material (la mayoría de las sillas de plástico apilables están producidas en plásticos baratos y poco reciclables) y la masificación se convirtió rápidamente en un problema de imagen. Bell Chair es el nombre de la nueva silla sostenible y asequible de Konstantin Grcic para Magis, pensada para intentar poner fin a la imagen negativa de la clásica silla monobloque. Bell es una silla apilable y liviana, fabricada al igual que sus antecesoras, mediante el proceso de moldeo por inyección de polipropileno. Adecuada para interior y exterior, Bell Chair está hecha de desechos industriales de la producción de Magis y de la industria automotriz local y es 100 % reciclable. Junto con un fabricante de plásticos, Konstantin Grcic ha desarrollado un nuevo tipo de polipropileno sostenible, que se utiliza exclusivamente para Bell Chair. Únicamente emplea 2.7 kg de plástico, un mínimo absoluto. Su precio también es significativo: 65 euros más IVA. Una silla asequible de alta calidad, técnicamente sofisticada hasta el último detalle, sostenible en su material y producida económicamente. Con este concepto, Grcic quiere iniciar un cambio en la conciencia de la industria. «Hay una demanda de sillas que sean asequibles y versátiles», dice. El diseño está disponible en tres colores, Sunrise, High Noon y Midnight: un albaricoque suave, blanco cálido y azul oscuro.

 

 

Vacaciones mentales

Si no tienes vacaciones porque te tocaron en pleno confinamiento, te traemos un pequeño aliciente para que, por lo menos, “viajes con la imaginación”. ¡Las escapadas mentales son de lo más necesarias y terapéuticas! Sí, ya sabemos que no son lo mismo, pero oye, ya verás cómo ayudan a llevar mejor el verano. Desde el 2011, el artista japonés Tatsuya Tanaka ha estado creando cada día escenas de bolsillo de su vida cotidiana como parte de un “calendario en miniatura”. «Al principio, creé estas escenas con el propósito de fotografiar mi colección de muñecas de diorama», cuenta Tanaka. Sin embargo, en los últimos meses, el trabajo del artista ha respondido a las medidas de confinamiento y distanciamiento social consecuencia de la pandemia del covid-19. Os recomendamos que le echéis un vistazo, ¡os aseguramos que no volveréis a ver las mascarillas de la misma forma!

 

 

La bici-paddle

Me pasa lo mismo que con el paddle surf. No sé si me parece horroroso o me parece maravilloso. Os presentamos la primera bici del mundo que, al igual que un famoso judío conocido en el mundo entero, os permitirá caminar, o más bien pedalear por las aguas. Fruto de una colaboración entre Red Shark Bikes y el diseñador Hammacher Schlemmer, esta combinación de ciclismo y paddleboard no requiere remo, solo tienes que darle a los pedales para avanzar. Cuenta con capacidad para tres personas, una que pedalea y las otras que petardean. Hecha a mano en polietileno de alta densidad, utiliza una doble capa de PVC cubierto con una almohadilla de tracción en EVA que proporciona una base segura. El marco de aluminio se asienta sobre el tablero, el sillín es de gel y la manivela está conectada a dos hélices montadas debajo del tablero, mientras que el manillar ajustable controla un timón en la popa del tablero. También hay una aleta estática (extraíble) y viene con bomba de aire y kit de reparación, por si pinchas. ¿Votos a favor? ¿Votos en contra? www.hammacher.com

 

 

Petit Pli

Beta (MSK) de Petit Pli es una mascarilla de tela lavable para la pandemia de coronavirus hecha de botellas de plástico recicladas con pliegues que se ajustan alrededor de la nariz y el mentón del usuario. «No me sorprendió escuchar esta semana que la humanidad está en riesgo de tener más máscaras que medusas en el Mediterráneo», explica el fundador de Petit Pli, Ryan Mario Yasin.

Beta (MSK) se abrocha alrededor del cuello como un collar de tela suave. Se puede usar un bolsillo entre la cara y el cuello para insertar un filtro desechable adicional. La máscara está hecha de poliéster 100% reciclado, un tejido resistente creado con plástico de botellas recicladas, y el patrón para Beta (MSK) está diseñado para desperdiciar la menor cantidad de tela posible. La máscara se puede lavar a máquina a 30 grados centígrados. Está disponible en cuatro colores. www.shop.petitpli.com