Iraia OIARZABAL
urretxu

Abierto el tramo de la GI-632 entre Urretxu y Antzuola que evita el alto de Deskarga

Con un coste de 55 millones de euros –un 17% más de lo asignado inicialmente– y dentro del plazo previsto, ayer fue inaugurado el tramo de la GI-632 que une Urretxu y Antzuola, evitando el paso por Deskarga.

El diputado general de Gipuzkoa, Martin Garitano, la diputada de Infraestructuras Viarias, Larraitz Ugarte y los alcaldes de Urretxu, Zumarraga y Antzuola inauguraron ayer el tramo de la carretera GI-632 –entre Beasain y Bergara– que une los municipios de Urretxu y Antzuola. Con este penúltimo paso, falta por finalizar la unión entre esta última localidad y Bergara para que el proyecto esté concluido.

Este último tramo permanece paralizado desde el pasado mes de febrero debido a problemas geológicos detectados durante las obras. La Diputación decidió por ello rescindir el contrato y presentar un nuevo proyecto. Este último ramal que queda por construir tendrá una distancia de 4,8 kilómetros y sus cinco viaductos ya están construidos, con lo que la parte principal de la obra ya está ejecutada.

La apertura del nuevo tramo inauguruado ayer supone un importante paso en la ejecución del proyecto que unirá la localidad guipuzcoana de Beasain con la vizcaina de Durango, ya que se evitará el paso de vehículos por el alto de Deskarga, una de las principales demandas de la comarca por ser una carretera con una importante afluencia de tráfico. Cada día, más de 9.000 vehículos circulan por ella, según datos aportados por la Diputación.

Durante la inauguración explicaron que la carretera une los enlaces de Urretxu/Legazpi con el semienlace de Antzuola, tiene una longitud de 2,7 kilómetros y contiene un doble túnel de 700 metros de longitud.

Su coste ha ascendido a 55 millones de euros, 50 de obra civil y cinco en instalaciones. El total supone un 17% más de lo adjudicado inicialmente.

Los encargados de dirigir la obra incidieron en que se trata de un terreno complejo y que ello ha provocado que en ocasiones las excavaciones hayan sido problemáticas. No obstante, señalaron que la parte final de la obra ha transcurrido con fluidez, lo que ha permitido cumplir con el plazo establecido.

Una vez finalizado el tramo que queda por construir, la GI-632 contará con 23 kilómetros de longitud y tendrá acceso a la AP-1.

Un «eje vertebrador»

Tras una visita por el túnel de Deskarga antes de que fuera abierto al tráfico, Larraitz Ugarte remarcó que el tramo entre Urretxu y Antzuola es un «eje vertebrador» debido a la función que ejerce como unión entre comarcas y territorios de Gipuzkoa, Bizkaia y Nafarroa.

Asimismo, en referencia a las acusaciones vertidas contra la institución foral en torno a la ejecución de obras, afirmó que se trata de un ejemplo a seguir en cuanto a cumplimiento de plazos y uso adecuado del dinero público, ya que la obra se ha realizado en el plazo de tiempo establecido y el presupuesto solo ha superado un 17% el previsto inicialmente.

En esta línea, el diputado general destacó que se ha realizado un «rigurosísimo» control del dinero público, «muy lejos» de otras obras realizadas anteriormente por Bidegi y Diputación, cuyo desfase, según manifestó, estaba en torno al 60%.