Iñaki IRIONDO
GASTEIZ
MUERTE DE IÑIGO CABACAS

Beltrán de Heredia ni desmiente ni explica lo dicho a la familia Cabacas

La consejera de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, ni desmintió ni explicó ayer las palabras de la familia de Iñigo Cabacas dando cuenta de que en una reunión con ella y con Jonan Fernández se les advirtió de que no todos los crímenes se resuelven y otros mensajes similares. Optó por atacar a quien le preguntaba, Julen Arzuaga.

En el marco del tercer aniversario de que Iñigo Cabacas muriera por un pelotazo en la cabeza disparado por la Ertzaintza, su familia mostró su queja por la actuación del Gobierno de Lakua, que cree que no está haciendo nada para que avance la justicia. En el acto de Bilbo, su padre, Manu Cabacas, hizo público que el Ejecutivo autonómico le había advertido de que no todos los crímenes se resuelven y se preguntó si con ello «están anticipando algo». Unos días antes, en una entrevista radiofónica, mostró su perplejidad y enfado por los comentarios escuchados en una reunión con la consejera de Seguridad y el secretario general de Paz y Convivencia, donde éste último les dijo que no pensara que las viudas de los ertzainas conseguían saber quién había matado a sus maridos.

El parlamentario de EH Bildu Julen Arzuaga preguntó ayer por ello a la consejera Estefanía Beltrán de Heredia en el Pleno de control al Gobierno, pero no hubo ni desmentido ni explicación de esas palabras.

La consejera dijo haberse reunido varias veces con la familia, «siempre en el ámbito de las relaciones personales», y que le «habría gustado» que hubieran seguido «en el ámbito de discreción». Dijo entender que los padres de Cabacas «valoren esos encuentros e incluso hagan manifestaciones», porque «los hacen desde el dolor y desde la desolación. Y lo comprendo porque comprendo su dolor».

Pero Estefanía Beltrán de Heredia afirmó que «por eso, no puedo aceptar lo que usted está haciendo estos días, señor Arzuaga». Y se preguntó «¿qué aporta al esclarecimiento de la muerte de Iñigo Cabacas, el dolor, la utilización del dolor de los padres? ¿Qué aporta utilizar el dolor como arma arrojadiza de crítica contra el Gobierno y contra los miembros del Gobierno, descontextualizando palabras de situaciones que usted no conoce porque usted no estuvo allí?»

«No me corresponde»

Julen Arzuaga le respondió que si conocía lo ocurrido era «por boca de Manu y Fina» y que si lo habían comunicado era «seguramente porque no podían más».

Denunció que la Consejería está personada en el caso y que no hace nada para que la investigación avance, e incluso está entorpeciéndola. Julen Arzuaga pidió a la consejera que «reflexione por qué la familia no encuentra soporte en su Gobierno para conseguir verdad y justicia. Reflexione por qué tienen esos sentimientos negativos hacía ustedes, sentimientos negativos por sus palabras, por sus hechos y por sus omisiones».

Estefanía Beltrán de Heredia insistió en que Arzuaga no estaba en esa conversación y «me pide que explique lo que no me corresponde explicar».

La consejera espetó al parlamentario que «usted no tiene derecho a utilizar conversaciones privadas porque no estuvo presente, porque no participó. Son conversaciones que desconoce». Y acabó acusándole de «hurgar» en el dolor de la familia, para utilizarlo «con fines partidistas y oportunidad electoral».

Hubo, por tanto, muchos reproches, pero ninguna explicación por parte de la consejera.

TESTIMONIO DE MANU CABACAS EN ENTREVISTA EN LA SER (10-4-2015)

Nos llamaron y nos reunimos con la consejera y Jonan Fernández. Les pedí que colaboraran con la justicia. La consejera, impertérrita. Como una roca. No me dijo ni no ni sí. Casi hubiera preferido que me hubiera dicho que no. Si no vas a hacer nada, di no.

Y el otro, el Jonan Fernández ya, ese me rompe los esquemas. Abrió la conversación –según él para romper el hielo– diciendo que no me creyera yo que todas las viudas de los ertzainas conseguían saber quién había matado a sus maridos. Yo me quedé... se me encendieron los ojos. ¡Qué tiene que ver el tocino con la velocidad! Cómo me puedes decir eso. Esto es una barbaridad.

Y la última vez que ha hablado conmigo, fue el día que íbamos dónde el fiscal, el señor Calparsoro. Y me llamó y me preguntó qué tal estaba. Y le dije qué como quieres que me encuentre si estoy viendo que no avanza nada y encima no aportáis nada. Y me dijo que no me hiciera enemigos, que no estaba en situación. Y le dije, vamos a ver, para ti hacerte enemigos es pedir justicia, hacerte enemigos es querer que se depuren responsabilidades, hacerte enemigos es que quede impune esto, pues no va a ser así. Para mí es hacerle justicia a mi hijo. Y no pararé hasta que lo consiga. Si tú no piensas así es porque no te ha pasado, pero a mí me han matado un hijo.