GARA
BILBO

Trabajadores de Gaiker-IK4 piden un cambio en la gestión del centro

Los trabajadores y trabajadoras de Gaiker-IK4 se concentraron el miércoles en Zamudio para exigir un cambio en la gestión del centro tecnológico, que atraviesa una delicada situación laboral y económica y que mantiene en vigor un ERE para todo el ejercicio.

Trabajadores de Gaiker-IK4 se han concentrado esta semana ante las instalaciones del centro tecnológico en Zamudio demandando un cambio en la gestión, ante la «difícil situación en la que se encuentran». Según explica LAB en una nota, la «delicada» situación se remonta a 2011, año de importantes pérdidas económicas debido, principalmente, a los recor- tes en subvención pública en I+D y a la reducción de la inversión en investigación por parte de las empresas privadas. Este escenario no ha mejorado en los siguientes ejercicios, alcanzándose una situación crítica en el 2014, cuando se cerró el año con unas pérdidas del 28%.

«Preocupa cada vez más que este deterioro, junto con la reordenación de la RVCTI que está acometiendo el Departamento de Desarrollo Económi- co y Competitividad del Gobierno vasco, pueda conducir a la supresión de un importante número de puestos de trabajo en el ámbito de la I+D», indica la central abertzale.

Gaiker-IK4 es una fundación privada sin ánimo de lucro dedicada a la I+D+i, perteneciente a la Red Vasca de Ciencia, Tecnología e Innovación, y regida por un patronato formado por 16 empresas privadas e instituciones públicas: Diputación de Bizkaia, Lakua y la Universidad del País Vasco (UPV/EHU).

A juicio de los trabajadores, una disminución de la masa investigadora de un centro tecnológico va «doblemente en detrimento de éste y de la sociedad en que se enclava. No sólo por la pérdida directa en conocimiento que conlleva la salida de estas personas, haciendo al centro menos competitivo; sino también por la pérdida de la inversión que se ha hecho en esos investigadores a lo largo de los años que han trabajado».

La dirección de Gaiker-IK4 ha optado por la reducción de la partida de «Gasto Social» para intentar paliar los malos resultados económicos. En 2013, amparándose en la Reforma Laboral de 2012, se eliminó la paga de diciembre mediante una Modificación Sustancial de Condiciones de Trabajo. En 2014 no se abonó la paga de julio y se eliminó la paga de diciembre. Pese a ello, a finales del 2014 se realizaron seis despidos y se presentó un ERE para todo el 2015, que está en vigor.