Aunque cuatro de sus txapelas en el Cuatro y Medio (2002, 2004, 2012 y 2012) y la del Parejas de 2008 llegaron en el Ogeta, no se puede decir que el gasteiztarra sea un frontón fetiche para Aimar Olaizola, no al menos, cuando la capital arabarra bulle en fiestas. Y es que, son ya tres los lustros desde que el delantero goizuetarra logró su última victoria en la feria de La Blanca. Fue en 2002 cuando, acompañado por Óscar Lasa, se impusieron a Titín III –el pelotari más laureado de la feria gasteiztarra– y Elkoro por 22-17 en la final. Desde entonces, Aimar ha disputado cuatro finales, la última en 2011, precisamente con Beroiz, su pareja de este año, pero el título se le ha resistido.

No lo tendrán sencillo en una edición en la que los navarros conforman una excepción en una feria concentrada en tres partidos y en la que la potencia y el golpe son el nexo de unión. En un frontón exigente como ninguno para los zagueros, Mikel Beroiz tendrá un difícil compromiso ante dos pegadores como Urrutikoetxea y Albisu, combinación que se repetirá en la semifinal de Aspe de mañana con Martínez de Irujo-Rezusta y Ezkurdia-Zubieta.

La dupla de Asegarce formó junta en un Parejas de muy mal recuerdo para ambos y seguro que querrán quitarse el mal de boca que les dejó un campeonato del que se descolgaron desde la primera jornada. El pasado sábado ya tuvieron su test en Azpeitia y las sensaciones fueron positivas, imponiéndose a una pareja de pedigrí como Martínez de Irujo y Zubieta por 22-14, con el delantero sumando 12 tantos y solo tres pérdidas el zaguero de Uharte.

Revancha de lo del año pasado

Si en estos quince años la trayectoria de Aimar Olaizola ha tenido de todo, en apenas unos meses, la vida de Mikel Urrutikoetxea ha dado un vuelco y la feria gasteiztarra es un claro exponente de ello. El año pasado tuvo que mediar la lesión de su amigo Pablo Berasaluze para que tuviera sitio en La Blanca y en esta se presenta vestido de colorado como corresponde durante todo el año al campeón Manomanista.

Se da la circunstancia de que la combinación que abrirá la feria fue la segunda semifinal del año pasado, en la que Urrutikoetxea-Albisu se impusieron por 14-22. Ezkurdia y Merino II impidieron en una reñida final que pudieran hacerse con el título, por lo que terminar lo que dejaron a medias en 2014 es el objetivo de la pareja vizcaino-guipuzcoana.

Si la semifinal del año pasado fue la prueba de sus progresos de aire, la txapela manomanista ha dado un gran empujón moral al de Zaratamo, que ya no se lo piensa tanto antes de pasar al ataque, mientras que Jon Ander Albisu fue el mejor pelotari de San Fermín y, a poco que consiga minimizar sus errores no forzados, conforman una pareja temible para cualquiera.

Recitales de Martínez de Irujo y Altuna

Dos delanteros de Aspe destacaron sobremanera en los estelares disputados ayer en Bera y Lizarra. Martínez de Irujo volvió a estar imparable en la localidad de Bortziriak, mientras que los pelotazales que se acercaron al Remontival despidieron con una sonora ovación a Jokin Altuna tras su exhibición.

En un adelanto de la segunda semifinal de La Blanca que se disputará mañana en Gasteiz, Martínez de Irujo-Rezusta se enfrentaron a Ezkurdia-Zubieta y la victoria cayó del lado de los primeros por 22-13. El cansancio de la acumulación de partidos parece no hacer mella en el delantero de Ibero, que rompió el partido desde el inicio (9-1) y, con 13 tantos en juego, protagonizó otra exhibición de recursos ofensivos. Rezusta estuvo a su altura y la pareja de la Sakana poco pudo hacer ante el vendaval del de Ibero en un frontón abarrotado. Mañana tienen la oportunidad de resarcirse en el Ogeta.

En Lizarra, Oinatz Bengoetxea no pudo lograr su primera victoria tras la reaparición y ayer, acompañado por Untoria, estuvo mucho más lejos que en los dos partidos anteriores (9-22). La razón fue un Jokin Altuna que, bien secundado por Barriola, hizo diabluras en los cuadros delanteros y terminó con 12 tantos y 2 saques en su haber.J.O.