Los inversores interpretaron el buen dato de empleo en EEUU como el inicio de la cuenta atrás, la de verdad, para la subida de los tipos de interés. Desde diciembre de 2008 no se han movido del entorno del 0% y los analistas apuestan por esta medida al unir las indicaciones previas de la presidenta de la Fed, Janet Yellen, sobre su intención de modificar el precio del dinero si el mercado laboral da muestras de robustez con las cifras publicadas ayer.

En julio se crearon en Estados Unidos 215.000 nuevos empleos, mientras que la tasa de paro se fijaba en el 5,3%, manteniéndose en el nivel más bajo de los últimos siete años. Este dato, pese a ser positivo para la economía, no fue del agrado de los inversores, y los índices de Wall Street lo sufrían con pérdidas en todos los índices.

Además, el pesimismo parece haberse instalado al otro lado del Atlántico, donde el Dow Jones encadenaba seis jornadas a la baja, que podrían alargarse hasta siete de mantenerse la caída de ayer al cierre.

El Ibex acabó en los 11.178,20 puntos, después de retroceder un 0,67%. En la semana apenas se deja un 0,02%, en tanto que sube en el año un 8,74%. Fráncfort (-0,81%), París (-0,72%) y Londres (-0,42%) acabaron también en rojo. En el Ibex, nuevo varapalo para Abengoa (-7,76%), que vuelve a las andadas tras un rebote de dos días. Desde enero baja un 40,22%. Técnicas Reunidas, Bankinter e Indra descontaron más de un 2%. Entre los grandes, el peor parado fue Inditex (-1,21%). Mientras tanto, la lista de avances estuvo liderada por ACS (+1,78%), Gas Natural (+1,48%) y Enagás (+1,33%).

En lo que respecta a la Bolsa de París, Saint Gobain y Sanofi bajaron más de un 2%, frente a Total (+1,10%), el mejor de la sesión. El Cac se revaloriza un 20,64% en el ejercicio.