Nueva Zelanda tuvo que poner toda la carne en el asador para doblegar a una correosa Argentina, que resistió durante una hora las embestidas de los All Blacks. Los vigentes campeones fueron ese martillo pilón que percute y percute contra la defensa rival hasta que esta se resquebraja por agotamiento.

Argentina nunca perdió la cara, e incluso se fue al descanso con una mínima ventaja (13-12), con el ensayo de Pagadizaval y amarillas para McCaw y Conrad Smith.

Pero el problema frente a los de negro es que los partidos duran 80 minutos, que su ritmo no cede y que los que entran desde el banquillo no tienen nada que envidiar a los titulares.

De este modo, la segunda mitad se jugó por completo en cancha albiazul, con los Pumas multiplicándose para frenar las oleadas oceánicas. Tanta insistencia dio sus frutos con los ensayos de Aaron Smith y Sam Cane (26-16).

En el choque que abría la jornada, Samoa ha hecho valer su favoritismo en los pronósticos para imponerse a Estados Unidos (25-16). Los oceánicos supieron imponerse a sus rivales en el aspecto disciplinario, y si bien no estuvieron excesivamente finos con el pie, sí acertaron lo suficiente en sus lanzamientos a palos para hacerse con la victoria.

Gales no tuvo compasión de la humilde selección de Uruguay y le endosó un contundente 54-9, con ocho ensayos para los dragones, incluido un hat trick de Cory Allen y un doblete de Gareth Davies.

Por otro lado, la selección francesa confirmó la gravedad de la lesión de su ala Yoann Huget, que se ha roto el ligamento cruzado de su rodilla derecha y dice adiós al Mundial. Una baja sensible para los de Saint-André.

El Mundial se toma dos días de descanso antes de regresar el miércoles con tres duelos. Escocia se estrenará ante la sorprendente Japón (15.30), Australia no puede fallar ante Fiji (17.45), y Francia buscará frente a Rumanía su segunda victoria (21.00).