Hacer un recorrido en el macizo del Gorbea es sinónimo de calidad, pues eso mismo es lo que hoy os propongo, un recorrido de calidad y exigente a través de unas fantásticas cumbres puntuables. Además, durante el recorrido tendremos la oportunidad de deleitarnos con las siguientes vistas, al norte el Valle de Orozko, al oeste el Valle de Aiala, al sur el Valle de Zuia y al este la mismísima cumbre del Gorbea. ¿Qué más se puede pedir?

Desde el bar de Baranbio sale una pista asfaltada muy empinada dirección este. Pronto llegaremos a un cruce en el que giraremos a la derecha. Todo esto está señalizado con carteles de madera, así que, sin pérdida alguna, llegaremos a la Ermita de Nuestra señora de Garrastatxu.

Justo antes de llegar a dicha Ermita, a la altura del aparcamiento, una pista a la izquierda continúa ascendiendo, la cogeremos. Avanzaremos por dicha pista sin salirnos en ninguna de sus desviaciones, el juego simplemente consiste en subir por el filo secundario. Cuando estamos a punto de llegar al filo principal superior, abandonaremos la pista por la que vamos para desviarnos a la izquierda. De esa manera, rodearemos el monte Nafakorta por su ladera noroeste para salir a su collado norte. Desde dicho collado norte tomaremos rumbo este para subir por el filo principal al Odoriaga (1.244 m), unas bonitas piedras salpican su cumbre. Desde aquí las vistas que tendréis de Itxina, Gorbea e, incluso Bilbo, os dejarán literalmente con la boca abierta.

Volveremos sobre nuestros pasos al Collado norte para bordear, esta vez por su ladera este, el Nafakorta. De esta guisa, nos plantaremos en el filo que une Nafakorta con Burbona, ni cortos ni perezosos, lo seguiremos. Según avancemos por él, veremos alguna pista que se desvía a la izquierda. Nosotros, en cambio, iremos de frente por el filo. La pista asciende hasta llegar al alto de la loma de un monte que cruza nuestro filo de este a oeste. En este punto cogeremos un bonito sendero que, dirección oeste, nos llevará al Burbona (934 m).

A partir de ahora, el recorrido se torna en andar por interminables bosques vírgenes de hayas, menudo atracón de naturaleza que nos vamos a dar. Desde la cumbre del Burbona seguiremos por el sendero que, dirección oeste, nos llevará por todo el cordal de la montaña. En breve, dicho sendero gira dirección sur y comienza a ascender. Pronto pasaremos al lado de la cumbre occidental del Burbona, por si queréis hacer la otra cumbre.

Continuaremos dirección sur por una pista que sigue dicho cordal. La pista esquiva todas las cumbres secundarias que encontraremos de ahora en adelante. También encontraremos desvíos en nuestro camino. Sin embargo, la premisa vuelve a ser la misma que antes, esto es, por el filo. Según avancemos, estaremos en todo momento bajo la atenta mirada del Berretin a nuestra izquierda y del valle de Baranbio a la derecha.

Cuando llevamos unos 4 kilómetros y medio desde Burbona, llegaremos a un cruce de senderos. Aquí cogeremos el de la derecha, el que nos lleva a Altube. Este está señalizado con un cartel, así que no tendréis problemas. Poco más adelante, la pista por la que vamos comienza a descender. Sin embargo, os recomiendo desviaros a la izquierda y continuar por el filo para hacer la última cumbre. En este punto del recorrido la cabeza ya dice que no a un último esfuerzo, pero vale la pena. Por dicha pista llegaremos en breve al Txintxularra (845 m), otro ejemplo de cumbre no puntuable y que, a mi juicio, debería de serlo con todas las de la ley.

Volveremos sobre nuestros pasos y nos meteremos en la primera pista que veamos a la izquierda. Enseguida volveremos a empalmar con la pista de bajada a Altube, bonitas vistas por las larras. Justo cuando estamos a punto de llegar a dicho pueblo, nos saldremos por un sendero a la derecha. De esa manera, terminaremos la excursión de hoy por un bonito camino que nos deja directos en Altube, broche de oro para una ruta también de oro.