GARA
sana’a

Al menos 15 muertos en el ataque a una residencia de ancianos en Yemen

El ataque de tres hombres armados contra una residencia de ancianos en la ciudad yemení de Adén, provocó la muerte de quince personas y evidenció la debilidad del Gobierno del país, que tiene su sede en esa ciudad tras ser expulsado de la capital por la rebelión hutí.

Al menos 15 personas murieron ayer por los disparos efectuados por tres hombres armados contra una residencia de ancianos en la ciudad yemení de Adén, según fuentes oficiales. Los fallecidos confirmados son cuatro monjas –de nacionalidad india–, dos trabajadoras yemeníes del centro, ocho residentes y un guardia de seguridad.

Los tres individuos, según residentes locales, se presentaron en las instalaciones bajo la excusa de que querían visitar a sus madres, antes de abrir fuego contra el guardia de seguridad. Después entraron en el recinto y abrieron fuego contra los ocupantes. Finalmente, se dieron a la fuga. Ningún grupo asumió la responsabilidad del ataque en las primeras horas, aunque, según una fuente de seguridad, los autores fueron extremistas que acusaban a la residencia proselitismo cristiano.

Situada en el popular barrio de Al-Sheij Ozman al-Faquir, pertenecía a la Fundación Madre Teresa, de la India, y en julio de 1998, un grupo de hombres armados atacó su centro de cuidados para discapacitados en la ciudad de Al-Hodeida, a orillas del Mar Rojo, donde murieron tres enfermeras.

El asalto revela la debilidad del actual Gobierno yemení, que tiene su sede en Adén, apoyado por Arabia Saudí, tras su expulsión el año pasado de la capital, Sana’a, por los rebeldes hutíes. La ciudad, que en su día fue uno de los grandes núcleos cosmopolitas de la región, se ha convertido en un territorio sin ley donde las comunidades cristianas han sido expulsadas y sus iglesias y cementerios, objeto de profanación. A pesar de los anuncios de negociaciones, la guerra continúa en Yemen, donde se vive una grave crisis humanitaria.

Según a Oficina de Derechos Humanos de la ONU, los bombardeos de la coalición militar formada liderada por Arabia Saudí han sido responsables de dos tercios de las muertes de civiles en Yemen ocurridas en febrero. Desde el 26 de marzo de 2015, cuando empezaron esos bombardeos, se han documentado 3.081 civiles muertos y 5.733 heridos. Por otro lado, los bancos internacionales han decidido recortar parte de las líneas de crédito a los transportistas de alimentos a Yemen ante la gravedad del conflicto en las zonas portuarias y la quiebra casi absoluta de su sistema financiero, en una decisión que agravará aún más la crisis de alimentos y expone a la población yemení a una hambruna generalizada.