Un extraordinario dispositivo de búsqueda –bomberos, agentes medioambientales, policías autonómicos, guardias civiles, pilotos; además de máquinas quitanieves, unidades caninas y dos helicópteros– se ha desplegado recientemente en el Maestrazgo de Castellón para rescatar a tres senderistas que se habían perdido en medio de una ventisca. Dos mujeres y un hombre que, en principio, tuvieron la fortuna de poder contactar con el 112 para exponer su situación y pedir ayuda.

Sin embargo, las duras condiciones del terreno y las adversas condiciones meteorológicas dificultaron el rescate, que tuvo que realizarse tanto por vía terrestre como por aérea. Por el camino, los equipos se encontraron con el hombre en estado de hipotermia, deshidratación y con congelaciones; les informó de dónde podrían localizar a las dos mujeres y de que ya no se podría hacer nada por ellas.

Su pérdida se produjo en las proximidades de Castell de Cabres, una pequeña población de la Comunidad Valenciana que se encuentra a 1.129 metros de altitud, en un recorrido conocido como «La ruta de los 7 pueblos de la Tinença de Benifassà». Una mezcla de viento, nieve y frío les desorientó y se vieron obligados a buscar refugio en unas ruinas sin cubierta. Sometidos a unas sensaciones térmicas de intenso frío, comenzaron a sufrir problemas de hipotermia.

A su llegada al lugar donde ocurrieron los hechos, los equipos de rescate encontraron a las dos mujeres fallecidas debido al frío. Sorprende saber que los tres senderistas eran muy experimentados y habían hecho recorridos por la zona con anterioridad. Al igual que sorprende que se animaran a salir con unas previsiones meteorológicas tan adversas (de hecho, se produjo una nevada tan intensa que incomunicó pueblos a partir de los 500 metros de altitud) y que su equipamiento fuera, al parecer, insuficiente.

Una buena ocasión para reflexionar de nuevo sobre temas como la importancia de las previsiones, de lo que puede resolver el 112, del equipamiento adecuado, de considerarse un experto o de creer que conocemos una zona.