Joseba ITURRIA
REAL

Oyarzabal endulza la temporada

El jugador realista revelación marcó en el último suspiro el gol que permitió a su equipo acabar la Liga con dos victorias consecutivas.

VALENCIA CLUB FÚTBOL 0

REAL SOCIEDAD 1

 

Mikel Oyarzabal dio a la Real en el último segundo del partido de Mestalla la victoria que le permite despedir la temporada con 48 puntos y colocarse en la octava posición que le corresponde por su presupuesto a la espera del resultado de mañana entre el Málaga y el Las Palmas.

La forma en la que Eusebio celebró el gol de la victoria demostró que no pensaba lo mismo que todos aquellos que decían que su equipo no tenía nada en juego ayer o en el anterior partido ante el Rayo Vallecano. Esos seis puntos conseguidos con tres goles de dos chavales que comenzaron la temporada con el filial son muy valiosos y permiten acabar con buenas sensaciones. Eso es muy importante después de una temporada complicada en la que el técnico vallisoletano asumió la dirección del equipo con solo nueve puntos, los mismos que el penúltimo, tras once jornadas.

Con Agirretxe e Iñigo Martínez lesionados, sin apenas aportación de Vela y Jonathas en las últimas jornadas, sin dos jugadores con las fichas altas de Canales y Granero, la Real fue capaz de cerrar la temporada con un partido serio en Mestalla y encontró el máximo premio en unos últimos minutos en los que pudo ganar el Valencia en dos ocasiones de Negredo, pero lo hizo el equipo blanquiazul gracias a Mikel Oyarzabal.

Dentro de una temporada en la que algunos jugadores realistas han decepcionado, el eibartarra ha supuesto el edulcorante para endulzar el postre final. Ha marcado en cinco de las últimas siete victorias de su equipo y ha acabado con seis goles y una asistencia. Números brillantes para un juvenil que solo ha jugado de inicio 16 partidos.

Antoine Griezmann, por poner un ejemplo, en su primera temporada en la máxima categoría con un año más jugó 37 partidos, 34 de inicio, metió siete goles y dio una asistencia.

Como ante el Rayo

Eusebio planteó el encuentro de una manera similar al del Rayo, con un 4-2-3-1 para emparejar a los pivotes Illarra y Pardo y al media punta –primero Oyarzabal, luego Xabi Prieto y después el juvenil–, con los tres medios centros del Valencia. Zurutuza cerraba la banda izquierda y Bautista peleaba con los centrales del Valencia. Con este planteamiento el partido estuvo muy controlado hasta el final.

El primer tiempo resultó equilibrado entre dos equipos que querían tener el balón, pero no fueron capaces de crear ocasiones. La Real no tuvo ninguna clara y el Valencia protagonizó las dos mejores en un remate de Piatti que desvió Reyes a corner y en el último suspiro del primer tiempo en un corner que Santos cabeceó fuera por poco.

La segunda parte tuvo dos fases diferentes. La primera muy controlada y con poco ritmo estuvo marcada por las interrupciones con una dura de entrada de Rubén Vezo sobre Mikel Oyarzabal que debió ser sancionada con su segunda tarjeta y otra similar a Aritz Elustondo. Pero ninguno de los dos se quiso bajar del partido, en el caso del lateral Odriozola ya estaba preparado para su debut, y aguantaron bien hasta el final.

También fueron importantes los minutos de Bruma cuando entró por la banda derecha. Con su salida el partido se revolucionó y en los últimos minutos llegaron las mejores ocasiones de los dos equipos. El internacional sub’21 portugués ya tuvo una buena oportunidad en un remate que tocó en un defensor y puso a prueba los reflejos de Jaume Domenech y otro remate suyo provocó la jugada del gol.

Fueron unos últimos minutos en los que la Real se vio inquietada en una ocasión de Santi Mina, en un remate lejano de Parejo y en dos buenas opciones de Negredo en las que estuvo cerca el gol del Valencia. Pero los locales no fueron capaces de enviar un remate entre los tres palos en todo el partido y en esa fase final en la que estaba más abierto el juego llegó en el último segundo el tanto de Oyarzabal.

Un gol que permite a la Real acabar por delante de un Valencia que tiene un presupuesto muy superior. Es verdad que los jugadores que más cuestan de la Real tampoco han respondido como no lo han hecho los valencianistas, pero ayer se ganó en Mestalla con diez canteranos y con cuatro jugadores que comenzaron la temporada en el filial. Eso debe ayudar a entender qué ha funcionado y qué no esta temporada y siempre. Esos seis puntos de los dos últimos partidos deben ayudar a confiar en una base que es de garantías a la espera de que los deben marcar la diferencia lo hagan.

 

«Vi el balón y me dije que va a entrar aunque sea con alguien»

Mikel Oyarzabal fue el protagonista tras el partido al señalar que «sabíamos que iba a ser un partido complicado y teníamos que venir a ganar y lo hemos conseguido. En la última jugada vas con todo al ataque, he visto el balón suelto y he dicho que va dentro aunque tenga que ir con alguien».

Su técnico, Eusebio, señaló que «ganar de esta forma el último partido da una alegría especial y deja un buen sabor de boca. Por eso lo hemos celebrado tanto. Ha sido un partido muy igualado con alternativas y, aunque nos ha costado generar ocasiones, el Valencia tampoco las ha hecho y tuvimos el control hasta que al final han llegado las opciones. Cualquiera podía haber ganado, pero la victoria ha caído de nuestro lado».

Jaume Domenech, portero del Valencia al que se ha situado en la órbita de la Real, dijo sobre su futuro que «me veo en el Valencia diez años. Es decisión del club, pero mi deseo lo sabe todo el mundo».GARA

 

Zubeldia, otro juvenil que debutó ayer

Jon Bautista tuvo la oportunidad de jugar por vez primera como titular, Mikel Oyarzabal y Aritz Elustondo completaron el partido como ha sido norma desde la llegada de Eusebio, Álvaro Odriozola estuvo a punto de debutar tras el golpe recibido por el beasaindarra y el que tuvo sus primeros minutos en la máxima categoría ayer fue otro juvenil, Igor Zubeldia, que demostró en el tiempo que tuvo la gran calidad y el futuro que tiene.