Hala Bedi Irratia figura como  un referente alternativo de comunicación cuyo origen se escenificó en el Gasteiz de los convulsos y efervescentes años 80. Desde la propia emisora recuerdan que este medio «nació en 1983 con un objetivo claro: dar voz a quienes no la tenían. Todo ha cambiado mucho desde entonces, y a día de hoy, Hala Bedi es un proyecto comunicativo que ha ido adaptándose continuamente a los nuevos tiempos».

El esfuerzo que conlleva adaptarse a estos tiempos tecnológicos y sociales tan cambiantes es, para Hala Bedi «una pequeña utopía en el espacio diverso y amplio que comparte con los movimientos populares de Araba». Es en esta relación con dichos movimientos donde se fundamenta una colaboración que ha obligado a la emisora a dar un paso más y transformarse en mucho más que una radio libre, alternativa y comunitaria. En este sentido, los responsables de la emisora subrayan que «el propio colectivo es un espacio libre, cada vez más plural y enriquecedor. Con el paso de los años, nos hemos convertido en una casa que va más allá de la propia radio o del proyecto comunicativo. Hoy en día, se compone de alrededor de 150 personas».

Uno de los puntos más destacados de este nuevo curso ha sido la puesta en marcha de un debate interno. Se trata de un proceso de reflexión que comenzó el pasado año y que culminará en los próximos meses. Los objetivos principales de este punto de inflexión del colectivo serán «responder a los cambios de las últimas décadas, reorganizar el colectivo y redefinir los pilares del proyecto, en un proceso de debate separado en bloques: Hala Bedi Bat, Hala Bedi Bi, multimedia, organización y proceso feminista. Tomando el feminismo como eje, el reto de este último bloque será, además de revisar las prácticas comunicativas de Hala Bedi, realizar una profunda transformación del colectivo». Finalmente, entre sus objetivos figura la intención de lograr la cifra de 999 “halabelarris”, personas que con sus diferentes aportaciones económicas hacen posible la realidad de este proyecto.