Atracón de finales en la penúltima jornada del Europeo de Berlín. Y muchas de ellas de velocidad, aunque la final de los 5.000 se llevó, tal vez, mayor protagonismo. En esa carrera, Ingebrigtsen, ese apellido casi impronunciable de la familia noruega, obtuvo la traducción perfecta en castellano: doblete.

Por un lado, porque Jakob, el adolescente de los tres hermanos –tan solo tiene 17 años–, con 13:17.06 –mejor marca europea sub-20–, ganó el oro después de haberse proclamado campeón de Europa en los 1.500 el día anterior. Y por otro, porque la medalla de plata se la llevó su hermano Henrik (13:18.75).

También dio que hablar el 200 femenino, en el que la británica Dina Asher-Smith revalidó el título de campeona europea y, de paso, anotó un mítico doblete de velocidad 100 y 200 más a los anales del atletismo. No solo eso, sino que además logró la hazaña con una mejor marca mundial del año de 21.89. La holandesa Dafne Schippers, actual campeona mundial y olímpica, se tuvo que conformar con la plata (22.14), que suma al bronce en los 100. Jamile Samuel completó el doblete holandés con el bronce.

El 4x100 relevos de esta noche, la penúltima carrera de los Europeos, será la última oportunidad de Schippers para superar a su archienemiga, una Asher-Smith que podría hacer el triplete y coronarse como la reina de estos campeonatos de Berlín.

Remontada en los 400

En los 400 metros se vivió una increíble remontada en la recta de meta. La polaca Justyna Swiety-Ersetic, con el mejor tiempo de la temporada (50.41), pudo superar a la griega Maria Belibasaki, que había dominado casi toda la final y se tuvo que conformar con batir el récord nacional con un 50.45. Sin duda, fue la mejor carrera de los 400 en Europa de lo que llevamos de año. Y es que tan solo 4 centésimas de segundo separaron a la polaca y a la griega. La velocista holandesa Lissane De Witte completó el podio con el récord nacional de su país (50.77).

El relevo 4x400 masculino parecía que iba a terminar con sorpresa con victoria española, pero Bruno Hortelano vio cómo en los metros finales le adelantaba uno de los hermanos Borlée y el último atleta británico.

Y en el relevo femenino, Polonia se llevó el oro, Francia la plata y Gran Bretaña el bronce.

La marcha es española

La jornada comenzó con un retraso en los 20 kilómetros marcha debido a un escape de gas en la zona de la Breitscheidplatz, donde estaba situado el circuito de la competición. Este hecho hizo que ambas categorías –un contingente de 58 atletas, 30 mujeres y 28 hombres– partiesen a la misma hora.

Así, el extremeño Álvaro Martín y la andaluza María Pérez regalaron a España un doblete de oro histórico que además reportó otro metal al equipo español, el de Diego García, plata.

«Cuatro» vascos en el maratón

Trihas Gebre, Elena Loyo e Iraitz Arrospide son los últimos tres vascos que competirán en el Europeo de Berlín, en maratón. Además, el equipo BM Bilbao ha llevado a Azucena Díaz, compañera de Gebre y Loyo.

La etíope-donostiarra se está adaptando aún a esta distancia y se estrena en una gran cita en 42 kilómetros, algo que le da «mucho miedo». Sin embargo, confía y da por buenas las referencias que su entrenador le ha pasado en los entrenamientos, por lo que su objetivo es «hacerlo lo mejor posible» y correr en menos de dos horas y media.

La navarra Elena Loyo, por su parte, quiere valerse del maratón del Europeo para «coger experiencia para las siguientes citas». Además, «no será un maratón para hacer marca, pero intentaré seguir progresando y trataré, por supuesto, hacer el mejor puesto posible», subrayó.

Iraitz Arrospide, de la Real Sociedad, se siente «un poco nervioso, como es normal», pero «con una ilusión inmensa, con buenas sensaciones y buenas esperanzas». El maratoniano de Villabona quiere aprovechar la presión como algo positivo e intentar hacer «un papel digno».