Agentes de la Ertzaintza localizaron ayer el cuerpo sin vida de una mujer en una vivienda de la calle Ollerías Altas de Bilbo. La víctima se llamaba Maguette Mbeugou, tenía 25 años y era madre de dos niñas. Su marido, de 38, que la degolló delante de las pequeñas, fue detenido.

Según informaron las agencias estatales citando fuentes policiales, los ertzainas se acercaron al número 25 de la calle Ollerías Altas a las 13.30, tras recibir la llamada de una vecina. Al llegar encontraron el cadáver de una mujer que presentaba signos de violencia. Horas más tarde, sobre las 19.00, fue detenido el sospechoso en la localidad guipuzcoana de Mutriku.

Los vecinos explicaron a los medios que nunca habían oído discutir a la pareja. Sin embargo, anoche el Departamento de Seguridad de Lakua confirmó que la mujer había pesentado una denuncia contra el hombre, ante la Policía Municipal de Bilbo, por violencia de género.

Concentración

Las reacciones a este crimen no se hicieron esperar. Los grupos municipales del Ayuntamiento de Bilbo aprobaron una declaración en la que condenan la muerte de Maguette Mbeugou, «asesinada trágicamente como consecuencia de ser víctima de una lamentable situación de violencia de género».

Recordaron a la ciudadanía que la muerte de la joven, de origen africano, «es la expresión máxima de la violencia de género, pero en el día a día se producen muchas actitudes y expresiones de estas agresiones contra las mujeres, todas ellas condenables y reprochables».

«La violencia que en sus diferentes formas se ejerce contra las mujeres es un atentado contra su integridad física y moral y un ataque a su dignidad; en consecuencia, una grave e intolerable violación de los derechos humanos», añadieron antes de animar a la sociedad a «posicionarse activamente ante cualquier expresión de violencia contra las mujeres, denunciándola, no consintiéndola, no permaneciendo en silencio y mostrando apoyo a las víctimas».

En este sentido, anunciaron la celebración de una concentración silenciosa hoy a las 10.30 en las escalinatas del Ayuntamiento. Una cita a la que se ha sumado la Diputación de Bizkaia, que mostró su «más firme repulsa ante este tipo de ataques machistas» y realizó un llamamiento al conjunto de la ciudadanía para que acuda a la concentración.

«Es preciso combatir los abusos del machismo en todos los ámbitos, desde el privado hasta lo público, sin descuidar la acción policial y judicial», indicó el Gobierno foral, que transmitió sus condolencias a los allegados de la víctima y recordó los servicios de atención existentes.

Expresión de desigualdad

Por su parte, Emakunde hizo hincapié en que «la violencia contra las mujeres es la expresión más brutal de la desigualdad». Y afirmó que «para construir una sociedad libre de violencia contra las mujeres es precisa una actitud activa de toda la ciudadanía».

Una opinión compartida por Eudel, que alertó de que «la violencia que en sus diferentes firmas se ejerce contra las mujeres, supone un serio atentado contra su dignidad e integridad física y moral. En consecuencia, una grave violación de los derechos humanos».

«Esta tragedia nos enfrenta a la responsabilidad que tenemos las instituciones y el conjunto de la sociedad vasca en hacer efectiva la igualdad en nuestros municipios», manifestó la asociación.