Jon ORMAZABAL
ELECCIÓN DE MATERIAL DE CARA A LA FINAL DEL CUATRO Y MEDIO

Con la magia de toda primera vez

El circuito profesional de mano ya tiene un nuevo templo para sus grandes citas, el Nafarroa Arena que ayer estrenó ritual, el de la elección de material, de cara a su primera gran final. Sin problemas con el cestaño, Altuna y Ezkurdia quedaron satisfechos con lo que les dispusieron, resultó un acto meramente protocolario, pero a su vez especial. Entre otras cosas, los protagonistas se enfrentaron a la inmensidad del Arena en solitario, sin botilleros ni ayudantes.

Desde la acción más sencilla al mayor de los retos, toda primera vez tiene un halo especial. El monumental Nafarroa Arena acoge el domingo su primera gran final de pelota –tras su exitosa inauguración– y, sin ningún atisbo de polémica en torno al material, la elección de las pelotas de ayer en el nuevo recinto iruindarra fue una buena toma de contacto. Desconocemos si la nueva cancha iruindarra llegará a alcanzar algún día del encanto del Labrit, pero seguro que nunca gozará de una ubicación tan privilegiada como el del corazón de la vieja Iruñea, pero eso no fue óbice para que en torno a 200 pelotazales se dieran un buen paseo hasta los alrededores de El Sadar para ver de cerca a los protagonistas de la final, los dos pelotaris y, sobre todo, la nueva instalación.

El de ayer no era el primer contacto de Jokin Altuna y Joseba Ezkurdia con el escenario en el que se disputarán la última txapela de este 2018, en el caso del de Arbizu incluso tuvo la opción de disputar un partido con las gradas llenas, pero para ellos también tuvo un punto iniciático, pues fue la primera elección de material de cara a una final en la que carecieron de cualquier tipo de ayuda para escoger los cueros con las que se disputarán la lana de la jaula. Quizá por eso de que también es la primera final del de la Sakana, el navarro al menos sintió cerca la presencia de un Juan Martínez de Irujo que, desde un segundo plano, no perdió detalle.

Eso sí, los dos acudieron con las ideas muy claras, encontraron lo que buscaron en el cestaño y la elección resultó rápida, pues en apenas 13 minutos los dos pelotaris de Aspe se abrazaban a Martín Alustiza para cumplir con otro acto protocolario, el de posar junto a un lote para la final que no generó ningún tipo de quejas.

«Las de todo el campeonato»

«Ha comentado Martín –Alustiza– que poner material en un frontón nuevo siempre presenta más dificultades, pero yo no he tenido ningún problema para elegir», apuntó un Jokin Altuna que se decantó por dos pelotas de 104,1 y 106,6 gramos. Una de ellas está al límite del reglamento por abajo, «pero hoy en día pienso que a eso del peso se le da mucha más importancia del que tiene. Que la pelota tenga dos gramos más o menos no se nota nada, se nota cuando la pelota anda y es ahí cuando solemos tener problemas».

Joseba Ezkurdia se decantó por dos cueros de 106 y 105,8 gramos, dos pelotas «como las que he venido utilizando en todo el campeonato, de las que andan cuando le das, de esas que cuesta mover». La intención es clara. «Como hasta ahora, intentar hacer daño con el saque. Antes quizá tiraba más por las pelotas vivas, pero ahora prefiero coger pelotas más fuertes».

Siendo las de Altuna algo más ligeras y tranquilas, la diferencia entre las cuatro no es para tanto, y es que el campeón adelantó que no tendrá «problemas en sacar una de las suyas si el partido lo requiere».

Le falta rodaje

A base de meter horas y pelotear, ambos le han ido tomando las medidas a un frontón «exigente», con esos inconvenientes de toda cancha nueva, es decir, algunos extraños en un frontis de bastante salida y la rugosidad de la pared izquierda. «Agarra bastante la pelota, es difícil restar pero bastante mejor que en Bilbo», apuntó un Ezkurdia al que el suelo le recordó al del Ogeta, «de los que agradece el juego de ataque».

Altuna nos emplazó al domingo cuando le preguntamos si beneficia al juego de alguno. «El Bizkaia no me gustaba nada y desde las dos txapelas que gané allí me gusta muchísimo». Eso sí, ni en Miribilla ni en Iruñea gusta cargar con el cartel de favorito que ayer se pasaron uno a otro, por experiencia o estado.

Ezkurdia: «Sé que si no llego a jugar bien, Jokin me va a pasar por encima»

La lesión que tanto ha mediatizado este Cuatro y Medio es pasado para un Jokin Altuna que dice estar disfrutando de esta semana previa a la final. «Las finales cuando estás fuera se viven con envidia y estoy disfrutando, los nervios ya llegarán según se acerque el día».

Su semblante ha cambiado mucho según ha ido quemando etapas y no esconde que «he notado mejoría, era complicado que hubiera ido a menos. No estaba bien, no me sentía bien pero es normal. Estoy a gusto con el campeonato realizado pero estoy mejor, me siento físicamente bien y suelto mejor el golpe, sin miedo y con ganas para la final», apuntó. «No le soltaba limpio a la pelota y cuando le das así te sale sin velocidad».

De todos modos recuerda que, sin estar a muy buen nivel, es imposible haber sacado adelante la semifinal ante Oinatz y estar aquí quiere decir algo». Ahora el rival es un Ezkurdia al que no se le ven lagunas. «Pero los fallos no tienen por qué ser en el juego. En las finales puede pasar cualquier cosa, son diferentes, no son un partido más».

Sus dos últimas finales de la jaula, la primera en contra y la siguiente a favor, se han decidido en el último tanto, pero no ve sencillo que pueda repetirse. «No lo sé, creo que en los partidos individuales cada vez es más complicado que sean igualados. Yo creo que es por la velocidad del juego, no quieres dejarle respirar al contrario».

«Si me ganó 22-10 en Donostia, es por algo. En este campeonato ha demostrado que ha sido el mejor y para mí es favorito. Él dirá que yo tengo más experiencia en las finales, pero el momento de juego es lo más importante y para mí él es el favorito», apuntó. J.O.

Altuna: «El momento de juego es lo más importante y creo que él es favorito»

Ezkurdia reconoció estar haciendo las paces con un frontón en el que las primeras sensaciones, tanto en la final del Master Codere como en el primer entrenamiento previo a la final fueron «desastrosas». &dcThree;Sin embargo, este nuevo Joseba Ezkurdia parece no temerle a nada y muestra una gran tranquilidad por mucho que se enfrente a su primera final individual.

«Estoy tranquilo, me veo bien, centrado en los entrenamientos y, a decir verdad, las sensaciones son buenas, pero luego hay que jugar el domingo, a esa hora y en ese lugar», apuntó el de Arbizu.

Jokin Altuna le precedió atendiendo a los medios en sala de prensa y quiso colocarle el cartel de favorito, algo que no comparte para nada el navarro. «Para nada, lo que he hecho hasta ahora no vale para nada, hay que jugar el domingo a las seis de la tarde y hay que hacerlo bien. El campeonato me da confianza porque veo que en momentos difíciles he sabido rendir, pero sé que en contra tengo un pelotari muy muy completo. Es su cuarta final, tiene 22 años pero juega una barbaridad. Si no juego bien me va a pasar por encima pues la cabeza que tiene Jokin... Es muy completo y si no hago lo mío no tengo nada que hacer y eso de favorito no lo veo así».

Sabe el de la Sakana que saltar a una cancha con 3.000 personas impresiona, pero no está muy seguro de que las condiciones del Nafarroa Arena le beneficien. «No sé quién se amoldará mejor. Sé que puedo hacerle daño con el saque, que puedo crearle problemas si le doy velocidad a la pelota, pero no debo obcecarme con eso. Jokin es un gran pelotari, se amolda a cualquier frontón y juega muchísimo en todos». J.O.