Sensaciones contrapuestas las de Jokin Altuna tras perder frente a Ezkurdia. A la de sentirse satisfecho por haber llegado a la final «después de un Campeonato en el que he sufrido mucho» confrontó la tristeza por no poder culminar dicho trabajo. «Mi objetivo era que Ezkurdia no dominase, pero he andado al ritmo que ha puesto él», reconoció el de Amezketa.

«Cuando uno le da más velocidad, el otro tiene que hacer más metros y eso se nota –amplió–. Ha habido tramos en los que he defendido muchísimo, pero esos tantos también pasan factura. De todos modos, me voy con la cabeza muy alta, porque el mundo no se acaba aquí, lo aprendí cuando perdí mi primera final, ahora toca olvidar cuanto antes y levantarse de esta derrota».

Analizando la estrategia que se había marcado previamente, Altuna admitió que una de sus bazas era ejecutar el saque-remate y que en algunos tantos «he podido hacer más», lo que no mermó su fortaleza mental, que le llevó a darle la vuelta al marcador. «Incluso con el 8-14 pensaba que tendría opciones, pero no pudo ser. Cuando lo das todo en la cancha, te vas más tranquilo a casa», añadió.

Altuna felicitó a su rival, «el mejor pelotari del campeonato», y aunque dejó caer que «vosotros habéis visto algunos pelotazos cómo han salido», no quiso achacar su derrota al estado el frontón, sino a que «Ezkurdia ha sido mucho mejor». En este sentido, resaltó que el de Arbizu «saca mucho en todos los frontones», otro de los apartados que marcó el devenir del choque. Altuna confesó que en el último saque del encuentro se dio un fuerte golpe contra la pared en un dedo de la mano izquierda, «que está muy hinchado y no sé si me permitirá jugar el siguiente partido».