«El Gobierno –afirmó ayer el consejero de Hacienda, Pedro Azpiazu– va a realizar un esfuerzo por explorar posibles márgenes a la propuesta inicial que realizamos a EH Bildu» sobre las peticiones puestas sobre la mesa por la izquierda soberanista para ayudar a las personas pensionistas cuyos ingresos y condiciones no les permiten llevar una vida digna. Esa es la posición del Ejecutivo autonómico, tras la reunión de ayer, a lo que el consejero añadió que «por su parte, EH Bildu se ha comprometido a realizar un esfuerzo por dar con puntos de encuentro para llegar a un acuerdo».

Primero el Gobierno dijo que las pensiones no eran competencia suya sino de Madrid; en la reunión del pasado viernes sostuvo que con la propuesta presentada a EH Bildu había «hecho todo el esfuerzo que ha podido». La izquierda soberanista llegó a la reunión de ayer asegurando que sin mas dinero para los pensionistas no habría acuerdo ni presupuestos. Y a la salida el consejero de Hacienda hablaba de que el Ejecutivo haría un esfuerzo más. Todavía, en todo caso, hacen falta mayores partidas para las personas pensionistas en situación difícil, y fuentes de la izquierda soberanista insisten en que esa es una condición imprescindible para conseguir sus dos abstenciones.

A la salida de la cita, la portavoz parlamentaria de EH Bildu, Maddalen Iriarte, afirmó que «el Gobierno Vasco nos ha trasladado su disposición a profundizar en la propuesta que EH Bildu le ha hecho, a cambio de dos abstenciones». Anunció que «en este momento estamos más cerca de llegar a un acuerdo en lo que se refiere a materias de empleo, aunque todavía quedan pasos por dar. Insistimos en que hay que dar respuesta a lo que la ciudadanía le está pidiendo en la calle».

Iriarte abundó en que «tenemos que hacer un esfuerzo para encontrar también un punto de acuerdo en materia de personas pensionistas». Pero especificó que «el Gobierno tendrá que hacer un esfuerzo grande para responder a la propuesta de EH Bildu, pero es un esfuerzo que debe hacer para dar respuesta a las personas que en estos momentos están demandando en la calle esa necesidad para hacer una vida digna».

Tras la reunión, ambas partes quedaron en volver a encontrarse, aunque sin fijar una fecha a la espera de que el Gobierno redacte otra propuesta. Maddalen Iriarte subrayó que «seguimos explorando vías para dar más cobertura a más personas que en estos momentos lo están pasando mal». Anunció que «en EH Bildu no tiraremos la toalla hasta el último segundo, porque creemos que nuestra propuesta es una respuesta a una demanda de los hombres y mujeres de este país».

El consejero de Hacienda, Pedro Azpiazu, también reconoció el «acercamiento en temas de empleo» y aseguró que «el Gobierno quiere sacar adelante este presupuesto. Que no le quepa duda a nadie».

Llegar a 50.000 pensionistas

En la actualidad, se complementa la pensión de unas 15.000 personas a través de la RGI. En su propuesta, EH Bildu propone «aumentar el alcance y la eficiencia de esos complementos e incrementarlos progresivamente hasta lograr una pensión mínima digna y unos ingresos suficientes. Según sus cálculos, en el primer ejercicio, los complementos pasarían de 15.000 a 50.000, asegurando a estos pensionistas el cobro de una cantidad similar a la del Salario Mínimo Interprofesional.

Después de que el PP se niegue siquiera a hablar de los presupuestos con el Gobierno de Lakua si antes no rompe su acuerdo sobre las bases del Nuevo Estatus con EH Bildu, y de que Elkarrekin Podemos diera por «agotada» la negociación al entender que no hay ningún interés en abordar sus propuestas, la oferta de dos abstenciones de la izquierda soberanista es la única oportunidad de que el Ejecutivo de Urkullu saque adelantes las cuestas de 2019.

 

Principio de acuerdo con Madrid sobre dos transferencias «fáciles»

Tras casi cuatro horas de reunión de la Ponencia Técnica de la Comisión Mixta de Transferencias, los gobiernos de Madrid y Lakua llegaron ayer a un «principio de acuerdo» sobre dos transferencias, una la referida a las líneas de tren Alonsotegi-Barakaldo y Bilbo-Basauri que el Tribunal Constitucional dictaminó hace ya dos años que su competencia correspondía a la CAV, y la otra sobre los seis kilómetros del tramo de la autopista AP-1 entre Armiñón y el límite con la provincia de Burgos.

Este paso permite el desbloqueo de la negociación entre ambos gobiernos. A partir de ahora –según explicó el Departamento de Gobernanza Pública y Autogobierno de Lakua– los equipos técnicos redactarán los documentos con los detalles de lo pactado de manera que el «principio de acuerdo» pueda confirmarse y pueda convocarse, lo antes posible, la Comisión Mixta de Transferencias y materializar, así, oficialmente ambas transferencias. Todavía no hay fecha.

El titular de la cartera y portavoz del Gobierno autonómico, Josu Erkoreka, afirmó que «si se refleja por escrito el principio de acuerdo alcanzado, como esperamos, sería positivo y muy relevante porque, tras siete años, supondría un paso en el camino hacia el cumplimiento íntegro del Estatuto de Gernika».

Añadió que «esperamos que a este principio de acuerdo le sigan otros acuerdos que nos lleven al horizonte de culminación de las 37 transferencias pendientes. Es importante aprovechar este clima de entendimiento para cerrar el calendario de todos los traspasos, en la línea de lo demandado por el Parlamento Vasco».

Cabe recordar que el acuerdo de gobierno entre PNV y PSE recoge que las transferencias prioritarias son la de «centros penitenciarios» y «gestión del régimen económico de la Seguridad Social, en los términos de la Disposición Transitoria quinta del Estatuto de Gernika».

Pese a ello, se eligió iniciar las conversaciones con el Gobierno de Pedro Sánchez por las transferencias ayer acordadas, por ser las más fáciles de acordar.

El Gobierno español mostro ayer su satisfacción por el hecho de que, «en cinco meses» se haya logrado «desatascar» el «retraso y parálisis» de las competencias pendientes de transferir a la CAV. En declaraciones a Europa Press, fuentes del Ejecutivo del PSOE afirmaron que el principio de acuerdo demuestra que «existía la voluntad política» y que «el diálogo y los instrumentos de cooperación y colaboración son fructíferos», tras la parálisis impuesta por el PP.