La fase de grupos de la Champions Cup ha superado su penúltima jornada y destacan dos datos. Por un lado las incógnitas. De las ocho plazas en juego –recordemos que pasan los líderes de cada grupo y los tres mejores segundos– siete no conocerán a su propietario hasta que se disputen los últimos encuentros. Hay nueve aspirantes, así que dos se quedarán con la miel en los labios.

El segundo apunte es el pobre rendimiento de los representantes de la Premiership, aunque uno de los suyos, Saracens, es el único equipo que tiene el billete asegurado. Exeter Chiefs cuenta con opciones matemáticas, si bien necesitará apelar a la épica y lograr la victoria en el bastión de Munster, Thomond Park.

Grupo 1

Leinster puso los puntos sobre las íes y arrebató el liderato a Toulouse con una clara victoria en Dublín. El vigente campeón no levantó el pie hasta garantizarse el bonus ofensivo con los ensayos de Conan, Kearney, Cronin y Byrne. El ensayo del sudafricano Kolbe sobre la bocina solo sirvió para maquillar el marcador de los rojinegros.

En la última jornada ambos tienen a priori compromisos asequibles contra Wasps y Bath. Con sus 20 puntos Leinster estaría probablemente en cuartos de final aunque perdiera, como primero o como uno de los mejores segundos, mientras que Toulouse deberá ganar en su estadio Ernest Wallon para disipar cualquier duda.

Grupo 2

Joe Carbery sentó cátedra en la victoria de Munster en Gloucester. El apertura nacido en Auckland (Nueva Zelanda), de padres irlandeses y criado en la isla esmeralda desde los 11 años, se apuntó la friolera de 26 tantos merced a dos ensayos, cinco transformaciones y un par de golpes de castigo.

Esto le vale para ponerse al frente de la tabla de anotadores con 59 puntos, dos más que los anotados por el siempre presente Owen Farrel (Saracens) y por Thomas Ramos (Toulouse).

Carbery (23 años) ha arribado a Limerick esta temporada, procedente de Leinster, donde ejercía como sustituto de Jonny Sexton. Su movimiento obedece al plan establecido de que goce de más continuidad, ya que está destinado a ser el heredero de Sexton –este es diez años mayor– con el número 10 de la selección del trébol.

Exeter se mantiene con vida tras vapulear a Castres. Como comentábamos anteriormente, cualquier esperanza pasa por imponerse en Thomond Park, el feudo de la Red Army, y eso son palabras mayores. Ojo, que los Chiefs se presentan con el liderato de la Premier como aval. Si se diera un triunfo visitante, habría que sacar la calculadora de los bonus y los averages, comparar con los resultados de otros grupos… hacer números como para convalidar media carrera de matemáticas.

Grupo 3

Saracens galopa a su aire, por encima del bien y del mal. Los de Mark McCall cuentan sus partidos por victorias y estarán en octavos, si bien no se han asegurado el primer puesto del grupo a pesar de contar con 23 de los 25 puntos posibles. Y no lo han hecho porque Glasgow Warriors ha salido respondón y no afloja. El sábado se verán las caras en cancha inglesa.

El pasado fin de semana, Saracens sumó una apacible victoria en el campo del Lyon, que sigue con su casillero de puntos virgen y es el único de los veinte contendientes que ni siquiera ha rascado al menos un raquítico bonus defensivo. Más resistencia planteó Cardiff Blues en su visita a Glasgow, pero los Warriors salieron victoriosos y con el punto extra bajo el brazo.

Grupo 4

Ulster se hizo fuerte en el Kingspan Stadium de Belfast para conseguir una meritoria victoria ante Racing –primera derrota de los parisinos–, ponerle picante al grupo y presentar su candidatura a estar entre los ocho mejores.

Los irlandeses firmaron un arranque fulgurante y se pusieron 13-0 antes del cuarto de hora, un flotador suficiente para navegar hasta buen puerto.

El joven ala Robert Baloucoune estrenó el casillero a los 7 minutos de su debut en Champions, mientras que Jacob Stockdale no faltó a su cita, posó dos ensayos, y es líder en este capítulo con 6, uno más que Immelman (Montpellier).

Grupo 5

Si hace cuatro años nos cuentan que Edimburgo le iba a mojar la oreja a Toulon en el Stade Felix Mayol –o incluso en terreno escocés–, el atrevido augur hubiera terminado embreado, emplumado y arrojado al abrevadero. Por aquel entonces los rojinegros eran amos y señores del Viejo Continente, intocables en su pedestal.

Pero los tiempos han cambiado, y en la actualidad Toulon es un zombie que suplica el fin de esta tortura, mientras que Edimburgo se jugará el liderato del grupo el viernes en Murrayfield frente a Montpellier, que no tuvo piedad y endosó siete ensayos a Newcastle. Dicen que todo lo que sube baja.

Challenge Cup

Tampoco están las cosas mucho más definidas en la segunda competición continental. Clermont y Worcester pasarán como primeros de los grupos 1 y 2, pero las otras seis plazas están por definir. En el grupo 3, Sale Sharks y Connacht están empatados, en el 4 La Rochelle manda con una buena renta sobre Bristol Bears, mientras que en el 5 los Harlequins londinenses aventajan en un punto a los italianos de Benetton.