Suceda lo que suceda en esta jornada que comenzó ayer en Larraintzar, habrá que esperar a la última de la liguilla para conocer el nombre de las cuatro parejas que accedan a semifinales, pero el apretado nudo que ahora mismo se atisba en la clasificación podría comenzar a desatarse esta tarde con la doble cita en Iruñea y Soria.

En este sentido, el partido más transcendental puede ser el del Labrit, en el que Ezkurdia-Ladis Galarza se juegan el llegar con opciones a la última semana ante Bengoetxea VI-Imaz, ya sin más presión que la de dejar una buena imagen y, a ser posible, echar una mano a sus compañeros de Baiko.

Una derrota de los navarros de Aspe, con cinco puntos, los dejaría fuera de cualquier posible combinación que les dé el pase a semifinales, por lo que jugarán con esa espada de doble filo que es la de la necesidad ante una pareja que, en principio, jugará sin tensión alguna.

Eso sí, en caso de obtener la victoria elevaría la presión del resto de combinaciones que se juegan el pase.

En Soria son Víctor-Albisu los que más se juegan ante unos Elezkano II-Rezusta ya clasificados, que seguro querrán quitarse de encima la mala imagen que mostraron la semana pasada ante Altuna III-Martija.

De ser una pareja que tenía el pase virtualmente conseguido, la dupla de Baiko pasa a temer por quedarse fuera tras la lesión de Olaizola y las tres últimas derrotas consecutivas. La combinación del de Ezcaray y el de Ataun se mostró muy irregular en 2018; hoy no puede fallar.