Como si del «coche escoba» de las pruebas ciclistas se tratase, Delteco Gipuzkoa Basket aprieta y apremia a sus más inmediatos rivales. Los donostiarras están consiguiendo hacerse fuertes en Illunbe y afrontan una nueva oportunidad para salir, ahora sí, de la zona de descenso. El rival es nada menos que el Obradoiro, quien llega a Illunbe a partir de las 20.30.

Sergio Valdeolmillos apuntaba en su rueda de prensa previa al partido que su equipo marcha «a contrarreloj» en busca de una remontada que se ve cercana a ratos, pero que no se termina de producir. En estos momentos, Gipuzkoa Basket ocupa la última plaza empatado con un UCAM Murcia –que ha jugado un partido menos que los donostiarras– que visita Manresa y a un partido de un Breogán que, para cuando arranque el choque de Illunbe, seguramente haya perdido frente al Real Madrid.

Rival difícil; racha positiva

«Veo a mis jugadores muy bien, físicamente y también a nivel mental tras estos resultados. Pero no podemos confiarnos nada si queremos lograr el objetivo», explicaba el técnico nazarí, consciente de que no se puede permitir ningún tropiezo en esta fase del calendario, toda vez que los últimos partidos se presentan aún más difíciles.

En ese sentido, cabe destacar que de los siete partidos entre GBC y Obradoiro, los cuatro primeros cayeron del lado compostelano, pero esta tendencia se ha revertido en las tres últimas ediciones. La pasada campaña los guipuzcoanos ganaron por 107-99 en la prórroga, un día en el que siete jugadores locales anotaron 11 puntos o más.