La intensa lluvia caída durante este pasado fin de semana causó numerosos problemas de inundaciones y desprendimientos, sobre todo en Oarsoaldea. La localidad más afectada fue Errenteria, donde se vieron imágenes que no se repetían desde los años 50, cuando hubo incluso víctimas mortales.

Según los testimonios que recogió EiTB en el municipio, comercios y establecimientos hosteleros afectados contabilizan los daños y limpiaban el barro para poder comenzar a trabajar cuanto antes. Tenían previsto, además, iniciar contacto con los seguros. Las dos calles más perjudicadas fueron Biteri y María de Lezo.

Al dejar de llover, los ríos fueron bajando poco a poco de nivel, tras un fin de semana de intensas lluvias que provocaron pequeñas inundaciones y varios desprendimientos en Gipuzkoa. Aparte de Errenteria, en Donostia, Oiartzun, Irun, Pasaia y Hernani los servicios de emergencia tuvieron que prestar especial atención.

El Departamento de Seguridad de Lakua informó de que en las cuencas del Bidasoa y Oiartzun habían atendido múltiples incidentes causados por el agua. Las estaciones subieron a nivel naranja en esos dos puntos, mientras que la estación de Ereñozu ascendió a nivel amarillo.

Uno de los incidentes más graves se registró en Lezo, donde un desprendimiento obligó a cortar la GI-636 a primera hora del domingo.