No pudo tener mejor remate la 32ª edición de la Emakumeen Bira. Elisa Longo Borghini sucede a Amanda Spratt en el palmarés de la prueba más importante del ciclismo femenino en Euskal Herria después de un final agónico, una escapada de la corredora italiana del Trek que tuvo un final feliz, después de que consiguiera burlar la vigilancia del pelotón en los compases finales del alto de Asentzio, última dificultad orográfica de la etapa y de la ronda.

Aunque en la meta de Oñati la diferencia a favor de Elisa Longo Borghini fuera de solo cuatro segundos respecto al pelotón donde venía Amanda Spratt, las bonificaciones terminaron favoreciendo a la transalpina; sobre todo la quinta plaza en la etapa de Amanda Spratt, que se acababa quedando sin bonificaciones y que no tuvo otra que ceder el maillot de líder en favor de Elisa Longo Borghini por solo dos segundos. Otra italiana, Soraya Paladin, cerraba el podio, a solo siete segundos de su compatriota, mientras que Ane Santesteban y Eider Merino terminaban la Emakumeen Bira firmemente instaladas en el Top 10, un Top 10 cerrado por la corredora valenciana del Bizkaia Durango Cristina Martínez.

Resultó algo chocante ver a Elisa Longo parándose a celebrar la victoria de etapa en Oñati, al punto que su gesto cerca estuvo de costarle el triunfo en la clasificación general. La ganadora del Strade Bianche de 2017 cerraba una larga sequía de victorias, ya que desde los Juegos del Mediterráneo del año pasado no había conseguido alzar los brazos. Entre bromas y veras, la corredora de Ornavasso pedía perdón por su descuido. «Después de tanto tiempo sin ganar, quería disfrutar de esta victoria», reconocería.

Una digna traca final

La Emakumeen Bira 2019 acabó viendo una etapa final que resultó digna de una traca perfecta. Una etapa muy larga para lo que se estila en el ciclismo femenino, más de 155 kilómetros con salida y llegada en Oñati y cuatro puertos de montaña en el camino de un recorrido ya de por sí sinuoso; el último puerto, el de Asentzio, a 17 kilómetros de la línea de meta.

Sobre un terreno quebrado de constantes subidas y bajadas, Mitchelton Scott no pudo al final controlar el sinfín de escaramuzas que tuvieron lugar a lo largo de la jornada. En ese sentido, se puede decir que tanto Movistar como Trek realizaron esta última etapa conchabados, con opciones para Tayler Wiles y Elisa Longo por parte del Trek y Mavi García por parte de Movistar. Así, a nadie le pudo extrañar que Malgozata Jasinska y Sheyla Gutiérrez por Movistar, más Anna Plichta del Trek se hubieran sumado a la fuga de la jornada en compañía de Nikola Noskova (Bigla) y Omer Shapira (Canyon SRAM). Sin embargo, en las rampas de Untzilla la escapada se acabaría viniendo abajo, siendo únicamente las dos representantes de Movistar quienes han seguido en el empeño de continuar hacia delante.

La hora de la verdad

Conforme se iba acercando la hora de la verdad, las principales candidatas empezaron a mostrarse. Faltaban 36 kilómetros para la meta de Oñati cuando la ronda volvía prácticamente a empezar, con la favoritas ubicándose en cabeza, a la espera de que en el alto de Asentzio se pudieran desatar las hostilidades finales, o casi.

Y así resultó, hasta que cerca de coronar Elisa Longo Borghini decidía saltar a por todas, coronando en primera plaza y sin mirar atrás a un pelotón compuesto por el resto de favoritas, empezando por la mismísima líder Amanda Spratt. Los 17 kilómetros finales camino hacia Oñati acabaron siendo una persecución loca sin que Longo optara por aflojar ni sus perseguidoras le consiguieran echar el guante. La italiana del Trek se fue con todo, acortando todo lo posible en cada una de las curvas y rotondas camino a la meta, mirando solo esporádicamente hacia atrás y sin aflojar bajo ningún concepto.

Con todo, el pequeño pelotón de favoritas no se durmió ni arrojó la toalla así como así. Pese a las escasas referencias televisivas, era evidente que a Elisa Longo no le iba a sobrar ni medio respiro en su loca carrera en pos de una victoria que acabaría siendo doble.

Entre badén y badén –suerte que nadie tuviera un tropezón, pero lo cierto es que la recta de meta no era lo mejor para un posible sprint–, el grupo de elegidas llegó a la meta con un obvio contacto visual sobre Elisa Longo. Una Longo Borghini que, a pesar de todo, se tomaba el segundo de celebrar su victoria en Oñati, toda vez que para lograrlo tuvo que realizar un meritorio esfuerzo en solitario.

Tensa espera

La decisión final sobre la suerte de la Emakumeen Bira, con todo, se hizo de rogar; hubo que acudir a los jueces para poder aclarar quién resultó la ganadora final de la Emakumeen Bira 2019. En esta última etapa, Elisa Longo Borghini partía con 12 segundos de desventaja respecto a Amanda Spratt y, en honor a la verdad, en meta solo obtenía cuatro segundos de renta.

Sin embargo, las bonificaciones que obtenía la corredora italiana, más las que no logró conseguir la australiana, acabaron siendo clave para que, por dos segundos, Elisa Longo Borghini relevara en el palmarés de la Emakumeen Bira a la propia Amanda Spratt, segunda clasificada, con Soraya Paladin tercera, a siete segundos de la vencedora, completando el podio final.

Elisa Longo: «Quería disfrutar de esta victoria»

Más de uno de los directores del Trek se debió echar las manos a la cabeza al ver a Elisa Longo Borghini celebrar su triunfo en la meta de Oñati en vez de verla sprintar. Sin embargo, la ciclista de Ornavasso pudo combinar su disfrute con el triunfo en la clasificación general.

«Lo siento mucho, pero honestamente, no me importaba nada la clasificación general. Me ha llevado dos años poder ganar una prueba –con todo, en 2018 obtuvo la medalla de oro de la prueba de fondo en carretera de los Juegos del Mediterráneo– y únicamente quería disfrutar por fin de esta victoria», resaltaba la corredora italiana en la meta de Oñati.

Por su parte, la líder hasta la jornada de ayer, Amanda Spratt, reconocía la decepción, pero prefería poner buena cara. «Hubiera querido ganar, pero Elisa Longo Borghini ha hecho merecimientos para llevarse la Emakumeen Bira. Ha sido una pequeña decepción, pero lo cierto es que he terminado la ronda vacía, no he podido hacer más, mientras que el equipo puede irse de esta carrera con la cabeza bien alta por su actuación y las miras puestas en las próximas carreras», reconocía la australiana, que se ha quedado a las puertas de revalidar su título de 2018. A. G.