Antonio Alvarez-Solís
Periodista
AZKEN PUNTUA

El fin de semana

Los encargados de hacer encuestas electorales –único negocio que parece funcionar en el país– han dedicado los últimos días a contar los automóviles que llenan las carreteras y autopistas de un fin de semana prolongado. Temen esos informáticos una catástrofe en las urnas.

Al parecer las encuestas reflejan una laxitud política que, de ser cierta, colocarían a España ante una decepción ideológica inocultable por mucho que se trate de ocultar mediante un lenguaje matemático que solo puede desentrañar un licenciado en ciencias exactas.

Yo he decidido leer esas cifras y los resultados de Ciudadanos me dan votantes partidos por la mitad, es decir, de cintura para abajo. Estoy seguro de que tal cosa constituye un grave error mío al despejar la «x» en la correspondiente ecuación de la encuesta.

Así es que como no tengo coche y no puedo irme también carretera adelante he decidido meterme en la cama en el pueblecito que habito en mi invalidez.

De todas formas he leído la oferta electoral del PSOE y me atrae, pues si sumo lo que me mejorarán por anciano, inválido, pensionista y una cosa más que no sé en qué consiste podré comprarle a mi mujer el coche eléctrico que me reclama cada día.

De momento, y hasta ver si son ciertas las promesas del Sr. Sánchez, he regalado a mi mujer una linterna.