Iker BIZKARGUENAGA
BILBO
CRISIS DEL CORONAVIRUS

Lakua delega en la Ertzaintza definir qué se puede hacer durante la fase 1

Después de aguardar hasta la medianoche del domingo para publicar el decreto del lehendakari, Lakua decidió ayer que fuera un documento de la Jefatura de la Ertzaintza el que definiera, contradiciendo incluso información de Osakidetza, los criterios a seguir en la fase 1 de la desescalada, que ha ido limando opciones según pasaban los días.

«Para conocer la información sobre las normas vigentes desde hoy en Euskadi respecto al Estado de Alarma, consultar los ‘Criterios de la Ertzaintza y Policías Locales sobre la alarma sanitaria’». Este mensaje escrito por SOS Deiak ayer a mediodía en su cuenta de Twitter puso el colofón al caos informativo protagonizado por el Gobierno de Lakua en torno al tránsito a la fase 1.

Lo ocurrido ayer fue una vuelta de tuerca a la incertidumbre que empezó a sembrarse el sábado, cuando se conoció que Araba, Bizkaia y Gipuzkoa iban a sufrir más restricciones que el resto en esta nueva etapa, y continuó con la espera hasta la publicación, en la medianoche del domingo, del decreto firmado por el lehendakari concretando las condiciones y límites.

El texto publicado en el BOPV no era, sin embargo, muy preciso y ayer aún había muchas dudas sobre qué se podrá o no se podrá hacer en esta fase. Unas dudas que al parecer afectaron al propio Ejecutivo, pues durante la mañana llegaron mensajes contradictorios a la ciudadanía.

Ejemplo de ello es lo ocurrido en la cuenta de SOS Deiak, que a primera hora lanzaba el siguiente mensaje: «Primera fase: Todas las personas y sectores deben seguir las recomendaciones, protocolos de seguridad y salud. En nuestra web están disponibles criterios, recomendaciones y carteles del Departamento de Salud». Ese tuit enlazaba con un link del Departamento de Salud de Lakua e iba acompañado por un cartel de Osakidetza –puede verse en la página siguiente– en el que, entre otras medidas, se fijaba que se podrían celebrar «reuniones en grupo de diez personas como máximo, en espacios cerrados». Sin embargo, poco después se difundió un documento elaborado por la Jefatura de la Ertzaintza, de doce páginas, donde se fijan los criterios que va a seguir la Policía y que rechaza la posibilidad de celebrar reuniones en domicilios. Son los criterios que, según dijo a esa misma hora en Radio Euskadi la titular de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, van a regir desde ahora en la CAV, y que contradicen, al menos en esa parte, la información que ya había publicado Osakidetza.

De esta forma, cuatro horas después del tuit inicial, SOS Deiak advertía lo siguiente: «En relación al apartado ‘personas’, lamentamos comunicar que el cartel queda invalidado. Seguir siempre los criterios de la Ertzaintza. No se pueden hacer reuniones en domicilios, txokos ni en lonjas juveniles».

La única referencia

Más allá del ejemplo concreto de la prohibición de reuniones en domicilios, que por contra sí que se podrán llevar a cabo en las terrazas de los bares, llama la atención que el documento de la Jefatura de la Ertzaintza «invalide» lo publicado por Osakidetza, como destaca también esa apelación a «seguir siempre los criterios de la Ertzaintza».

Según fuentes de Seguridad citadas por Efe, ese texto representa «la aplicación práctica del decreto» publicado en el BOPV. «Es la forma de concretar, es la parte interpretativa para que la Ertzaintza y las policías municipales sepan cómo actuar», dijeron esas fuentes, que no explicaron el por qué del cambio de criterio y si el mismo no se había trasladado a todos los organismos dependientes de Lakua, como Osakidetza o SOS Deiak.

Lo que sí parece claro es que Lakua ayer delegó en la Policía autonómica la decisión sobre qué se puede o no se puede hacer en esta fase, o al menos la difusión de las medidas, pues de inmediato el escrito de la Jefatura de la Ertzaintza fue tomado como única referencia válida, hasta el punto de que gobiernos municipales lo enlazaron de inmediato en las redes sociales. El propio Ejecutivo lo difundió un par de veces a lo largo de la jornada, e incluso fue retuiteado por la cuenta de Osakidetza sin dar mayores explicaciones.

Lo ocurrido provocó debate en las redes. Por un lado, por el malestar que causó la prohibición de reuniones en domicilios, algo que la víspera se daba por hecho, y por otro, por la duda que suscitó la validez como referencia legal de un documento de la Jefatura de la Ertzaintza.

Los comerciantes, molestos

Otro síntoma de lo caótica que fue la primera jornada de la fase 1 fueron las críticas recibidas por parte de asociaciones de comerciantes de Araba, Gipuzkoa y Bizkaia. En este herrialde, lamentaron que la falta de información de Lakua provocara que el primer día fuera para ellas un «desconcierto total». «No tenemos información del Gobierno Vasco, hemos tenido que hacerlo a nuestra manera», dijeron a NAIZ desde BizkaiDendak, que pidió al Ejecutivo «claridad». «No podemos esperar tres días para saber si será posible contar con más clientes o no», criticó.

«Estamos un poco perdidos», lamentaba por su parte un comerciante gasteiztarra, quien añadía que «se redactan un montón de comunicados. El Ayuntamiento redacta uno, el Gobierno Vasco otro, la Ertzaintza te remite otro comunicado que no se parece a los anteriores... es un pequeño desastre».

Por su parte, la Federación Mercantil de Gipuzkoa solicitó a Lakua que «recapacite» y que elimine en ese herrialde las restricciones de movilidad adicionales que ha implantado en la fase 1 de la desescalada ya que, a su juicio, «no es justo» que se apliquen allí. Argumenta que es el territorio donde «la evolución de la pandemia ha sido más reducida y más controlada». Al parecer de la Federación guipuzcoana, «la pequeña ventaja sobre las multinacionales» que se podría dar en una «fase 1 normal» desaparecerá en 15 días cuando las «fase 0,5 y fase 2» coincidan en el tiempo y se solapen.

Vuelta a la escuela en Nafarroa

Menos controvertido fue el cambio de fase en Nafarroa y el inicio del desconfinamiento en Ipar Euskal Herria, marcados por un tiempo bastante fresco y lluvioso, que no acompañó a las ganas de salir a la calle, y por una actividad todavía al ralentí.

En Nafarroa, más allá de lo que ocurría en las calles, fue significativo el acuerdo en el Parlamento en torno al criterio del Consejo Escolar de que este curso ya no se retome la actividad presencial en los centros educativos. En este sentido, los grupos parlamentarios instaron al Ejecutivo a que se centre en la organización del próximo curso, posición que choca con lo que va a ocurrir en la CAV, donde la actividad docente presencial va a reanudarse a partir del próximo lunes para los cursos más altos.

En Iruñea, todos los portavoces coincidieron ayer en priorizar la salud de alumnado y docentes en la vuelta a las aulas.

 

La cifra de fallecidos y positivos confirman la tendencia

El número de positivos por Covid-19 detectados en Hego Euskal Herria volvió a ser ayer bastante bajo y, aunque la cantidad de test realizados fue también inferior, debido al efecto del fin de semana, parece constatarse que la tendencia iniciada hace varias semanas se mantiene.

Una tendencia descendente que quedaría corroborada por la cifra de fallecidos contabilizada hasta las 20.00 horas del domingo, siete, pues son menos de la mitad que la jornada anterior y se sitúa en parámetros similares a los días previos al confinamiento. Con todas las prevenciones que desde el inicio de la crisis sanitaria han acompañado a estos datos, es evidente que la situación es más desahogada que en marzo o en abril, cuando se llegaron a superar los sesenta decesos diarios.

Respecto a los nuevos casos, los test PCR, que indican si una persona está o no infectada en ese momento, dejan apenas 24 positivos, la mayoría de ellos en Nafarroa (13), con Bizkaia en segundo lugar (10), un único caso en Araba y ninguno en Gipuzkoa. Estas cifras están condicionadas por el número de pruebas realizadas, una cuarta parte de las que se suelen hacer entre semana, al menos en la CAV (1.493, por las cinco mil que se suelen llevar a cabo), y seguramente volverán a repuntar a partir de mañana. Pero pese a ello son muy pocos positivos. En este caso, además, la cantidad no es mucho mayor cuando se agregan los detectados por test rápido, pues la suma de casos totales se queda en 56, algo más de un tercio que la jornada precedente.

En el lado negativo se puede apuntar una ligera subida en el número de personas hospitalizadas, seis, que detiene la bajada apreciada en los últimos días. Por contra, la cantidad de pacientes ingresados en las unidades de cuidados intensivos sigue disminuyendo; el domingo cuatro personas abandonaron las UCI, de modo que por primera vez desde el momento álgido de la pandemia la cifra total no alcanza el centenar.

A la espera de ver qué depara esta primera fase de la desescalada, los números asientan la percepción de que existe un retroceso en la extensión de la enfermedad.I.B.