La que se puede ver en Barcelona es la obra más reciente del desaparecido creador de Usurbil, realizada en sus últimos cinco años de vida. «Se muestran diez óleos y cuatro témperas, de diverso formato», explicó a GARA Usoa Zumeta.

Su hija se mostró feliz por la muestra. Zumeta expuso por primera vez en la galería en 2018. «Fue a través de una galería de Bilbo –relató su hija–. Nos mostraron su interés por exponer la obra de mi padre. Él estuvo aquí, en Barcelona en aquella ocasión y quedó muy satisfecho con aquella experiencia. Tras su fallecimiento nos volvieron a ofrecer la oportunidad de organizar una nueva muestra y dijimos que sí». Usoa Zumeta, quien ha comisariado la exposición, se puso manos a la obra el pasado verano. «La selección de obra nos ha llevado cerca de dos meses», explicó.

La Sala Dalmau es una galería histórica de Barcelona, ubicada en pleno centro de la ciudad. A través de los artistas que conforman su “cartera” se pueden apreciar las diferentes corrientes artísticas del siglo XX, desde las vanguardias históricas y el constructivismo de Joaquín Torres García hasta una selección de pintores contemporáneos.

«En esta ocasión han querido dar un salto hacia las vanguardias, a una obra más actual. Y la obra de mi padre encajaba muy bien ahí», agregó Usoa Zumeta.

Mariana Draper –fundó la galería en 1979 junto a su padre Francesc– conserva un recuerdo imborrable del día que conoció a Zumeta. «Hombre parco en palabras, pero de mirada limpia y cercana que invitaba a la conversación, y a su vez inspiraba un profundo respeto», señaló.

Fue en la primavera de 2018. «Fui a verle a San Sebastián para seleccionar la obra. Pocos meses después, y con enorme ilusión, presentamos la exposición en nuestra galería. «Tristemente, tan solo dos años después y de forma inesperada, Zumeta fallecía en San Sebastián, pintando hasta el último momento. En plenitud y con una obra que quería seguir hablando».

Ahora quiere rendirle un homenaje con esta nueva exposición, que reúne obra de diferentes períodos de su trayectoria. «Gesto, color y verdad le definen. Zumeta fue uno de los grandes de la vanguardia vasca de postguerra. No hay más que seguir su trayectoria y la solidez de su carrera, siempre coherente, valiente y al margen de modas. Creo que esta exposición será una nueva ocasión para poder disfrutar de la salvaje belleza de su pintura», indicó.

«La explosión de color y la gestualidad de sus cuadros nos hacía difícil seleccionar cuáles formarían parte de nuestra exposición. Era una obra magnífica, apasionada, violenta y valiente. Hemos tenido la inmensa suerte de haber podido conocer a un artista excepcional, a un ser humano maravilloso y a un renovador de la pintura vasca. Junto a Oteiza o Chillida fundó el grupo Gaur que revolucionó la plástica de Euskadi».