GARA
CICLISMO

Oier Lazkano brilla en la prueba A Través de Flandes que gana Christophe Laporte

El alavés, protagonista en la escapada del día que acabó a 5,8 kms de la meta, luchó al sprint por ser segundo y se llevó el premio a la combatividad.

Oier Lazkano saluda al vencedor Laporte en el podium de A Través de Flandes.
Oier Lazkano saluda al vencedor Laporte en el podium de A Través de Flandes. (MOVISTAR TEAM)

Reza el dicho que el segundo clasificado es el primero de los perdedores, pero esta clase de categóricas afirmaciones se equivocan muchas veces, y esta es una de ellas. El gasteiztarra de Movistar Oier Lazkano brilló como nadie en la 77ª A Través de Flandes, y refrendaba ayer su gran actuación con una más que meritoria segunda plaza, a 15 segundos del ganador Christophe Laporte, que con esta victoria refrendaba a su vez su triunfo en Wevelgem del fin de semana, zanjando así la polémica por el «regalo» que le hizo su compañero del Jumbo-Visma Wout Van Aert.

Solo el ciclista galo superaba a Oier Lazkano, que poco pudo hacer cuando este arrancó con un cambio de ritmo en pos del triunfo a cuatro kilómetros para la llegada. Al menos se llevó la segunda plaza después de mantener la fuga con el noruego Kristoff hasta 6 km de meta y ser capaz de volver a atacar hasta colgarse la medalla de plata. «Estoy muy contento con la carrera, íbamos todos fundidos, menos Laporte, con un equipo que está haciendo una gran temporada», señaló Lazkano.

DE FUGADO A REVELACIÓN

Lo cierto es que Lazkano fue el protagonista del día en un trazado con estrechamientos en los pasos adoquinados. Se escapó de inicio con Kristoff (Uno-X), Vanhoof (Flanders), Zukowsky (Q36.5), Gidich (Astana) y Heinschke ( DSM), pero a falta de 67 kilómetros, el grupo se redujo a 3 y 1:42 de ventaja.

Por detrás, entre latigazos, el Jumbo-Visma se empeñó en insinuar las intenciones de victoria, por lo que produjo un corte de 9 corredores que se iban a convertir en los perseguidores de Lazkano y Kristoff.

Pero los de atrás se tuvieron que emplear a fondo. El gasteiztarra no cedía, el gigante noruego tampoco, y ambos mantuvieron una pequeña diferencia hasta la pancarta de 6 kilómetros a la línea de meta.

La carrera se encontró con una nueva situación con 10 hombres delante. Hasta que Laporte sacó su carta ganadora a 4.000 metros de Waregem. Un cambio de ritmo marca de la casa le permitió abrir un hueco de una docena de segundos para ganar. Por detrás aún tuvo fuerzas Lazkano para rebelarse de nuevo, con el castigo en las piernas de todo el día en fuga. El gasteiztarra tensó y se llevó un segundo puesto de dulce sabor. Fue el combativo del día. Una buena forma de presentarse en sociedad.