EH Bildu valorará hoy el paso adelante en Catalunya, pero Sortu y EA se adelantaron para expresar su felicitación a los partidos catalanes y apostar por una vía vasca hacia la soberanía.

Hasier Arraiz, presidente de Sortu, recalcó en una declaración que su partido «tiene el firme compromiso» de impulsar «un proceso similar con nuestro propio camino». «En la vía vasca nos encontraremos, hasta la independencia», aseguró.

Tras recalcar la satisfacción por la capacidad de acuerdo de las formaciones políticas catalanas, Arraiz se dirigió expresamente a PSOE y PP para instarles a que «acepten este principio democrático que es el derecho a decidir».

EA reaccionó igualmente al máximo nivel. Su secretario general, Pello Urizar, felicitó también a los partidos catalanes y remarcó la necesidad de una «unidad de acción» en torno al derecho a decidir en Euskal Herria. Recordó además que el Parlamento de Gasteiz tiene una amplia mayoría al respecto (48 de 75 representantes), lo que supone «una buena base desde la que comenzar a trabajar, sin olvidar al resto del país y sus instituciones y la enorme fuerza de la ciudadanía».

«La experiencia catalana, y también lo vivido en Euskal Herria con EH Bildu, demuestran que la vía del acuerdo es la única que permite obtener resultado», constata Urizar.

Lakua: «No se debería impedir»

Frente a ello, el PNV se limitó a mostrar su respeto a la consulta catalana, en una declaración mucho más tibia y que no hace referencia alguna a una opción similar en Euskal Herria.

En una nota oficial, el PNV manifestó que «acoge con profundo respeto la decisión adoptada por el Govern de la Generalitat de Catalunya y por su president, Artur Mas, de convocar una consulta popular el 9 de diciembre de 2014 para conocer la opinión de los catalanes sobre su futuro. Este respeto es extensible tanto a la consulta en sí como a la formulación de la pregunta, pues una y otra emanan del deseo del pueblo catalán, que tiene que ser dueño de su porvenir».

«EAJ-PNV quiere destacar que esta consulta es un nuevo hito de un proceso que tiene su origen en la voluntad mayoritaria de la ciudadanía y de las instituciones catalanas, y que ha seguido un recorrido acorde con los principios democráticos y la legalidad vigente», añade la declaración del PNV.

Lógicamente en términos muy similares fue la valoración del Gobierno de Lakua. Su portavoz, Josu Erkoreka, priorizó el «respeto ante un acuerdo libre y legítimamente alcanzado por los partidos que representan a la mayoría de la sociedad catalana» y defendió el principio de la democracia porque «lo que se reivindica en ese acuerdo es una expresión democrática libre, que nadie, desde ninguna instancia política o institucional debería impedir bajo ningún concepto».

«Con independencia de la posición» que adopte el Estado, Lakua ve «evidente que no se puede poner puertas al campo».