GIPUZKOA BASKET-VALENCIA BASKET

Después del parón copero, Gipuzkoa Basket regresa a la competición. El conjunto donostiarra tendrá que roer un hueso bien duro como es el Valencia Basket, recuperado de sus malas sensaciones del torneo del KO con una contundente victoria en el Last 32 de la Eurocup.

Ciertamente, la recta final de la primera vuelta de la Liga ACB se le hizo larga al cuadro que dirige Sito Alonso, sobre todo en su principal figura, Jason Robinson, afectado de problemas musculares y gripales. Así las cosas, el parón del fin de semana pasado le ha servido al cuadro guipuzcoano para recuperar un poco las fuerzas y afrontar la segunda mitad de la campaña.

Todo lo va a necesitar Gipuzkoa Basket, ya que su rival de este mediodía ha derrotado a los donostiarras en 11 de sus 13 últimos enfrentamientos. Resultó especialmente doloroso el último partido entre ambos contendientes, disputado en La Fonteta en la segunda jornada liguera de la temporada: los de Perasovic se impusieron por 87-58, un partido en el que los guipuzcoanos ya perdieron todas sus opciones en el primer cuarto, a cuyo final se llegaba 23-10. El propio Sito Alonso, al hacer balance de la primera vuelta, resaltaba este partido, como único ejemplo en el que «el equipo no compitió».

Recuperación y liberación

«Esta semana ha sido de trabajo de recuperación y liberación, de oxigenación por parte de la plantilla», explicaba Sito Alonso en la previa al partido.

El técnico de Monzón se centraba, ante un rival tan peligroso, en «ser consecuentes con las cosas que se han hecho bien, intentar guardarlas, y subir nuestro nivel competitivo a partir de tener mucha más ambición para que las cosas que nos pueden pasar cuando abandonamos las cosas que solemos hacer bien, no nos vuelvan a pasar».

«No podemos pensar en revanchas, pero sí en autoexigirnos en cada entrenamiento para alcanzar el máximo nivel. Nosotros debemos ser muy conscientes de que si no hacemos todas nuestras cosas bien, podemos perder perfectamente todos los partidos de la Liga. Mientras, si las hacemos bien, tenemos la posibilidad de competir por ganar todos los partidos», añadía.

Entre el equipo taronja llega la novedad de Ksistof Lavrinovic, que llega en lugar del lesionado Lishchuk. El pívot lituano ofrece una rotación interior más, lo cual le da a Velimir Perasovic una opción aún mayor de imponer un ritmo físico mayor al partido. Más trabajo para el bueno de Doblas bajo el aro.