Por segunda jornada consecutiva, fruto de la sanción a Javi Gracia, Alfredo compareció ante los medios para confirmar la diferente sensación que dio el equipo antes y después del descanso. «En la segunda parte hemos salido con más fe, buscando los caminos del gol y crean- do ocasiones hasta el último minuto, este es el Osasuna que todos queremos ver», señaló.

El paso por vestuarios fue como el del Rubicón, marcó un antes y un después en las sensaciones que dejaron los locales. «No ha habido ningún cambio táctico, lo que les hemos tratado de transmitir a los jugadores es que creyesen un poco más en ellos mismos. También es cierto que, cuando lo tienes todo perdido, arriesgas más, los laterales han sido más incisivos y el equipo ha estado más junto», destacó el técnico rojillo.

«No todo ha sido empuje -matizó- porque también tenemos gente de calidad y ahí han aportado lo suyo futbolistas como De las Cuevas, Lobato o Roberto Torres a balón parado. A partir de ahora, todos vamos a tener que sacar lo máximo de nosotros mismos, ya que se avecinan encuentros frente a rivales directos, ante los que tenemos que ir a ganar».

Interpelado por esa imagen tan diferente entre una y otra parte, el segundo entrenador osasunista apuntó al momento psicológico que estaba viviendo la escuadra navarra tras encadenar cinco derrotas consecutivas, una racha que acabó rompiéndose ayer. «Todo ello va generando dudas e incertidumbre, pero la segunda parte ha sido un ejemplo de constancia e insistencia», destacó.

Alfredo admitió que el encajar un gol tan temprano y ante un rival rápido y preciso como la Real no auguraba nada bueno. «He pensado que nos iban a coger mucho a la contra, pero lo que más me preocupaba es que el equipo solo fabricaba ocasiones a balón parado, en esa primera parte es normal que el equipo haya sembrado dudas, pero estoy feliz porque en la segunda mitad ha demostrado que no se les ha olvidado jugar al fútbol y presionar, me quedo con eso de cara al futuro inmediato», alabó.