Podría parecer extraño que el máximo realizador, con cinco dianas en seis partidos, tenga que dar explicaciones sobre el rendimiento defensivo del equipo pero, como él mismo explicó, se trata de una labor colectiva en la que «tenemos que apretar todos, del portero hacia arriba y del delantero hacia abajo». Según Nino, resucitado como goleador en esta nueva etapa rojilla en Segunda, se intentaron «corregir los errores tras el partido contra el Mallorca», pero de bien poco sirvió.

«Teníamos en la cabeza mantener la portería a cero», algo que solo se logró durante cuatro minutos, amplió el atacante almeriense, para quien el problema solo se soluciona a través de la receta del trabajo. «De esto se sale con entrenamientos, porque tenemos potencial defensivo para cambiar la situación», añadió, si bien no pudo ocultar que encajar ocho goles en dos partidos únicamente puede producir «malas sensaciones».

Y aunque no le gusta pronunciarse sobre las actuaciones arbitrales, Nino sí que calificó como «clave» la jugada del penalti en contra a falta de diez minutos para el final. «Con el 2-3 ellos estaban cansados, pero el 3-3 les da la vida y nosotros nos encontramos encima con una lesión de cinco meses. Fíjate todo lo que nos pasa en esa jugada», resaltó el ariete rojillo.

Si la defensa es ahora mismo el tema de conversación de todos los aficionados y el reto inmediato para el cuerpo técnico, la capacidad goleadora -la segunda mayor de la categoría, con 13 tantos- está en el otro lado de la balanza, encarnando Nino la eficacia individual de cara al marco contrario.

«En lo personal me encuentro muy a gusto, valorado e ilusionado, tal y como he sido siempre. Estoy contento por los goles, pero me gusta que sirvan para ganar porque el fútbol es un deporte de equipo», recordó, si bien destacó que la escuadra navarra está viendo portería con facilidad, «que es lo difícil en el fútbol».

Pese a la derrota en Lugo, el veterano atacante insistió en que «esto acaba de empezar, tenemos ganas de seguir trabajando y enchufados. Si ganamos el sábado, estás otra vez en la parte de arriba».