Novak Djokovic se aseguró terminar el año, por tercera vez, como número uno del mundo al imponerse ayer al checo Tomas Berdych por 6-2 y 6-2, en su último partido del Grupo Rojo del Masters de Londres y clasificarse para las semifinales.

Gracias a su 30ª victoria consecutiva, el jugador serbio de 27 años no puede ser alcanzado en el ránking por Roger Federer, incluso si el suizo ganara el Másters y la Copa Davis, terminará el curso en los más alto del ránking, como en 2011 y 2012.

Nole, siempre sonriente, sumó por tanto su tercera victoria en el torneo londinense de este año y la 13ª consecutiva allí desde 2012. Además, recibió en la pista inglesa un trofeo por su tercera corona como el mejor del año. A este ritmo puede convertirse en el primer jugador, desde Ivan Lendl en 1987, en sumar tres títulos seguidos en la Copa de Maestros, si mañana gana este certamen por cuarta vez (2008, 2012 y 2013).

Hoy, en las semifinales, se medirá a la gran revelación si no de la temporada, sí del torneo, el japonés Kei Nishikori, pero sobre la pista dura londinense solo parece hacerle sombra Federer, en un estado de forma de ensueño, como demostró el jueves humillando al escocés Andy Murray (6-0 y 6-1).

Ayer, Djokovic barrió a Berdych, que se vio con un 4-0 en contra al principio de cada set antes de aprovechar un momento de relax del balcánico. En cada manga sumó apenas dos juegos. Impotente, el número 7 no pudo hacer nada por evitar su 17ª derrota en 19 partidos contra la estrella serbia. El líder de la ATP suma 30 partidos invicto sobre cemento, desde el torneo París-Bercy en 2012.

Además, Stanislas Wawrinka se enfrentará a Federer en una semifinal suiza tras ganar ayer los tres juegos que necesitaba ante el croata Marin Cilic.