AVIRON 14

LA ROCHELLE 0

El Aviron volvió a demostrar que sigue siendo fuerte cuando juega en casa, algo que no lo hace cuando disputa lejos de su estadio. El objetivo de ayer era acabar bien, dar minutos a los menos habituales y asegurar el tercer puesto del grupo, que lo consiguió, aunque no tiene ninguna opción de lograr el billete para los cuartos.

El duelo de ayer no despertó ningún interés entre los seguidores del Aviron y tan solo fueron los más fieles, que no pasaron de 2.000 personas, la entrada más floja de la última década. Y es que la competición no despierta expectación y además no había nada en juego. Pese a ello el Aviron trató de no defraudar a sus seguidores y desde el inicio se fue a por el partido ante un La Rochelle, que tampoco tenía nada en juego.

Cuando es solo uno el que pone ganas de ganar, normalmente es el que se lleva los puntos y ayer es lo que sucedió, gracias a dos ensayos transformados, lo que le permitieron asegurarse los cuatro puntos. Todavía queda una jornada más, donde de nuevo tendrán protagonismo los menos habituales y luego habrá que pensar en la liga, que es donde tiene que poner todas sus fuerzas el Aviron, para tratar de evitar el descenso y para ello hay que seguir sumando de cuatro en cuatro.