Aitor Etxaburu enviaba ayer una nota a los medios de comunicación en respuesta a algunas de las razones expuestas por Tati Garmendia, responsable de Bera Bera, en la rueda de prensa que había ofrecido el pasado miércoles, y que el ya exentrenador del equipo no comparte.

Tras reconocer que el club está en su derecho de cambiar de entrenador, «y tengo que aceptar la decisión», Etxaburu coincide a grandes rasgos con la visión ofrecida por el club de que «ha habido una gran diferencia en la manera de ver las cosas entre mi persona y la directiva en lo relativo a trabajo, preparación, dinámica, grupo...», y añade que ello había derivado en «un desencuentro, y que por tanto la relación no haya sido la adecuada, al igual que el funcionamiento interno». Pero lo que Etxaburu no comparte es lo referido a su falta de implicación.

Lo que dice la nota en este sentido, textualmente, es lo siguiente: «El feeling, la confianza, la implicación y el trabajo en equipo no es solo cosa de una persona. Implicación es para mí revisar quincenalmente el trabajo que se está realizando para corregirlo si es el caso, es establecer proyectos y marcar líneas de actuación para un futuro, es diseñar los planes y acciones para trabajar con la base... todo ello con periodicidad. Implicación es para mí, no hacer la vista gorda a los problemas presentados por mi parte en octubre y en diciembre referentes a comportamientos de funcionamiento interno del grupo y sí es implicación resolverlos y darles una respuesta. Todo esto es lo que yo entiendo por implicación al trabajo y que por parte del club no he visto.

Implicación con la base... los únicos planes de actuación que se han puesto encima de la mesa son los míos. Aún estoy esperando otras propuestas, o en todo caso, a que por parte del Bera Bera se me presente un listado de acciones dirigidas a las escuelas y a los clubes, o un programa de tecnificaciones, o una campaña de captación, etc.».

Aclaraciones sobre el proyecto

Respecto al proyecto de Bera Bera citado por Garmendia, Aitor Etxaburu muestra su sorpresa: «Cuando se habla de implicación con los proyectos del club, me pregunto ¿Qué proyectos? Yo no he visto ningún proyecto, ni ningún plan a medio-largo plazo de tipo deportivo, institucional, social, etc. Conozco mejor los proyectos deportivos y sociales del Zarautz que los del Bera Bera. No digo que no los haya, pero a mí el único proyecto que se me ha presentado es el del rendimiento del primer equipo acompañado de un plan de comunicación para rentabilizar los títulos y conseguir subvenciones. Yo no juzgo si este proyecto es correcto o no, pero es el único que se me ha presentado y por tanto el único con el que me he implicado».

El técnico eibartarra también alude a las valoraciones sobre la marcha y el funcionamiento del equipo: «No creo que este sea el foro para hablar de aspectos técnicos tácticos o de programación. Pero antes de hablar de ello, todos podemos revisar estadísticas de temporadas pasadas en cuanto a goles encajados y recibidos, zonas de eficacia, pérdidas de balón, porcentajes de acierto, etc. y compararlos con los de esta temporada».

Como conclusión, Aitor Etxaburu reitera que «si ambas partes tienen visiones distintas de trabajo y no comparten proyectos de futuro, es comprensible que se exploren nuevas vías», y finaliza con una crítica mordaz dirigida a Tati Garmendia -sin nombrarla-: «Pero entrar en descalificaciones personales con argumentos subjetivos basados en comentarios o apreciaciones individuales, en vez de utilizar datos medibles o tangibles, dice muy poco como persona de quien los utiliza».