La Real comunicó ayer el balance de la campaña de renovación de abonos, que se ha cerrado con 27.913 abonados, incluidos en ese capítulo los que afloraron la pasada temporada con el título de abonados corporativos. Comenzó la temporada con 29.277 y la campaña de renovación con 29.110. De esa cifra se han producido 1.885 bajas y se registraron 688 altas.

El descenso de 1.197 abonados es el más importante en una campaña de renovación de abonos de la Real desde los 1.475 registrados en la temporada 2006-07, la del descenso. La bajada más importante se dio en la temporada 2005-06, en la que se perdieron 3.258 tras una fuerte subida de los precios.

La aparición el año pasado de la figura del abonado corporativo, que agrupa a empresas y a contraprestaciones comerciales o de otro tipo, dificulta comparar la cifra actual de abonados con las de años anteriores. Según los datos ofrecidos ayer por la Real, de los 27.913 que agrupa como abonados, 2.894 son corporativos, con lo que la cifra de abonados individuales convencionales se reduce a 25.019.

De esa cantidad 18.441 son mayores de 21 años, 1.297 tienen entre 18 y 21 años, 2.607 entre 15 y 18 y 2.674 son menores de 15 años. 20.308 son abonados masculinos y 4.767 féminas. La capital gana por estrecho margen (13.909 por 13.167) al resto de Gipuzkoa y hay 837 de fuera del territorio guipuzcoano, de los que 730 corresponden al resto de Euskal Herria y 107 viven fuera de la nación.

Unas cifras como hace diez años

El descenso registrado en una temporada en la que la Real ha quedado eliminada de competición europea coloca las cifras de 25.000 abonados individuales en las cifras de hace diez años, cuando se pasó de 28.434 que establecieron el récord en la primera temporada de la Champions (2003-04) a los 25.453 de marzo de 2005, de los que medio millar eran empresas.

La primera vez que la Real superó la carrera de los 25.000 abonados fue en la temporada en la que se clasificó para la UEFA en 1998. Ese año se procedió a construir unos nuevos graderíos en los fondos que, unidos a los resultados deportivos, provocaron que la Real pasara de los 24.000 abonados de marzo de 1998 a los 27.029 con los que se cerró el año.

La cifra bajó en los años previos al descenso tras registrarse un gran aumento en el precio de los abonos, que unido a los malos resultados provocaron que la Real bajara a Segunda con 20.636 abonados. En marzo del 2009 la cifra tocó fondo al bajar por vez primera de los 20.000 y quedarse en 19.790. Desde entonces con el ascenso volvió a situarse en el entorno de los 25.000, al que se ha vuelto tras la eliminación europea a pesar de dos años sin subidas de cuotas ni medios días del club.