Jon ORMAZABAL
Laboral Kutxa Baskonia

Vuelven a cogerles el gusto a las tardes de modorra

La monumental bronca de Perasovic a James con el partido encarrilado y casi terminado fue el único sobresalto en la plácida victoria ante el UCAM Murcia.

LABORAL K. BASKONIA 90

UCAM MURCIA 67


En el modo de vida actual, las tardes dominicales han tomado forma de transición entre el bullicio del fin de semana que cada vez comienza antes y el frenético día a día y, con un calendario tan enrevesado como el del Baskonia, que el viernes disputó un partido de Euroliga en Croacia, los gasteiztarras han recuperado la buena costumbre de despachar sus quehaceres domésticos por la vía rápida cuando el rival se lo permite. Tras lo del año pasado, la visita de UCAM Murcia tenía su peligro pero los gasteiztarras recuperaron ese concepto de Liga de dos velocidades para solventarla sin contemplaciones ante los suyos.

Sin embargo, Velimir Perasovic no permite que la modorra o la desidia se apodere de los suyos y Mike James fue el pagano de su ira, al recibir una de las mayores broncas que se recuerdan por estos lares, con el partido ya resuelto y que hizo que el Baskonia terminara jugando sin bases y con Blazic como encargado de subir el balón, ya que Adams se había ganado el reposo con otro gran partido.

En el otro bando, la mayor muestra de agresividad murciana también estuvo en el análisis del partido de Fotis Katsikaris. «Esta actitud no me gusta nada. Saliendo de Murcia somos otro equipo, tenemos una actitud lamentable, hay que cambiar. Ha sido una vergüenza cómo hemos jugado y hemos defendido. Me siento como un tonto, lo digo así de claro. No podemos jugar así ante un equipo que viene de perder y de un gran viaje el viernes, que sale sin entrenar y nos pasa por encima, cuando llevamos toda la semana preparando este partido. Mi español o mi inglés deben ser muy malos, porque griegos no tengo ninguno en la plantilla».

Las palabras del técnico griego son también un buen resumen de lo que pasó sobre el parqué gasteiztarra, que también se podría sintetizar con el 110-56 en valoración que mostró la estadística al finalizar el partido. El bikini que gustaba decir a Boza Maljkovic tapó poco ayer en el coliseo azulgrana.

Dominio desde el inicio

Y es que el partido quedó prácticamente decidido desde el primer cuarto. Los locales salieron decididos a resarcirse del revés del viernes y el cansancio no existió. O se lo contagiaron a un UCAM Murcia que no estuvo en condiciones de presentar batalla durante todo el partido.

Los azulgranas imprimieron un gran ritmo desde el salto inicial. Con Hanga y Caseur como estiletes ofensivos, para el minuto siete ya metieron tierra de por medio con un 19-7. Antelo y Benite eran los únicos visitantes capaces de encontrar grietas en la defensa baskonista y los cambios del técnico rival no impidieron que los baskonistas se escapasen 27-13 al final del primer cuarto.

Hasta que los triples de Kelati y la dirección de Campazzo surtieron algo de efecto, ni siquiera hacerse con el control del rebote dio a los murcianos la opción de rebajar la desventaja de los diez puntos (41-32 en el minutos 18) para volver a descolgarse en el descanso 48-36.

El duelo se rompió definitivamente a la vuelta del vestuario, en unos cuatro primeros minutos en los que Baskonia destrozó de nuevo al Murcia con un 10-0 de parcial. Una defensa férrea permitió exhibirse a Hanga con un espectacular mate, y además cobrándose una técnica.

Llegó a superar los 30 puntos de ventaja el Baskonia, 85-54 a falta de cinco minutos para la conclusión, pero no quiso hacer excesiva sangre de un rival entregado en una tarde bastante plácida en Zurbano.