En declaraciones a los periodistas después de que la Policía Municipal y la Policía española hayan retirado las barras instaladas en el Auzogune de San Fermín Txikito, Romeo ha expresado su apoyo a «los vecinos, la fiesta, que la gente se divierta en paz y en libertad».
Ha añadido que «quien ha perdido toda razón es quien solo es capaz de usar la razón de la fuerza, la razón de la fuerza desproporcionada de los cuerpos policiales frente a unos vecinos que quieren divertirse en fiestas como ocurre todos los años con absoluta normalidad».
En su opinión, lo sucedido «perjudica a la ciudad, perjudica a Iruñea, al vecindario y a la hostelería del casco antiguo que se merece otro respeto, otro alcalde con mayor altura de miras y mayor capacidad política para gestionar los retos de la ciudad».

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