Maider IANTZI - Alberto PRADILLA

10.000 kilómetros que relanzan las esperanzas de juzgar al franquismo

Tras hacer 10.000 kilómetros en busca de justicia, los querellantes vascos han regresado satisfechos desde Argentina, con la esperanza de que declaren más personas por videoconferencia y de que la jueza María Servini de Cubría realice más imputaciones.

El portavoz de Goldatu Josu Ibargutxi ve claro que la investigación de los crímenes franquistas ha tomado fuerza. En declaraciones a los medios de comunicación al término del viaje a Argentina, expresaba ayer que había encontrado a la jueza María Servini «más proactiva que nunca». Destacó que la magistrada pudo mirar a los ojos a las víctimas; por ejemplo, a Ascensión Mendieta, que declaró con 88 años. Informó también de que Servini ha acelerado la investigación y de que cabe la posibilidad de que impute a otras tres personas: Rodolfo Martín Villa (apuntado por Andoni Txasko como uno de los responsables de la actuación del 3 de marzo en Gasteiz, donde murieron cinco personas), José Utrera Molina (suegro del ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, que fue uno de los ministros de Franco que firmó la sentencia a muerte de Salvador Puig) y Fernando Suárez (que dio la orden de matar a Txiki, Otaegi y tres militantes del FRAP).

Felipe Izagirre, franciscano torturado en Gipuzkoa y encarcelado en la cárcel de Zamora, declaró en nombre de los 16 sacerdotes vascos que estuvieron presos en este lugar y que sufrieron malos tratos. Contó a GARA que para él este viaje, que empezó el 29 de noviembre y finalizó este fin de semana, ha sido «muy profundo» y que ha regresado con mejor impresión de lo que pensaba.

Diversidad de la delegación

Remarcó que la delegación de una treintena de personas que acudió a Buenos Aires era muy diversa. La formaban Ascensión Mendieta, que perdió a su padre; una representante de la asociación de niños robados; un hombre de Madrid cuyo padre trabajó como esclavo en trabajos de construcción durante la guerra... Había catalanes, asturianos, andaluces... aglutinados todos en la coordinadora estatal de apoyo a la querella argentina contra crímenes del franquismo (Ceaqua).

Desde Euskal Herria, declararon cuatro: la bilbaina de 57 años María Josefa Zorroza, que denunció la muerte de su tío Teófilo; el ondarroarra Jon Arrizabalaga, hermano de Andoni, protagonista de la canción «Itziarren semea», brutalmente torturado por Jesús Muñecas; Andoni Txasko, que relató la represión policial de una huelga en su ciudad, Gasteiz, el 3 de marzo de 1976; y el propio Felipe Izagirre, que censuró la complicidad de la Iglesia.

Parlamentarios de la Cámara de Gasteiz también se han reunido con la jueza María Servini: Maribel Vaquero y Juan Carlos Ramírez-Escudero (PNV), Julen Arzuaga (EH Bildu) y Mikel Unzalu (PSE), en calidad de miembros de la comisión de Derechos Humanos, Igualdad y Participación Ciudadana. Sabino Cuadra fue representante de Amaiur.

Antes de empezar a tomar declaraciones, la magistrada recibió al grupo de políticos y víctimas. Estos le expusieron los casos y le consultaron si cabía la posibilidad de escuchar más testimonios mediante videoconferencia, ya que no está al alcance de todos viajar hasta allí.

Otro de los objetivos que buscan ahora los querellantes es lograr que el país en el que se está desarrollando la querella se persone como parte en la causa contra el franquismo. Esto implicaría una mayor presión diplomática para el Estado español, que hasta el momento ha respondido con diversas trabas. En este sentido, los participantes en la visita destacaron la buena acogida en diversas instituciones argentinas, como el Parlamento.