Jon Ormazabal

Ezkurdia se enfrenta a su último gran reto

El de Arbizu se enfrenta el sábado en el Atano a Jokin Altuna, el obstáculo ante el que ha tropezado en dos de sus últimos tres asaltos al Manomanista, la txapela que le queda por conquistar.

Joseba Ezkurdia reconoce tener clavada la espina de no haber podido eliminar a Altuna en el Manomanista. (Jon URBE/FOKU)
Joseba Ezkurdia reconoce tener clavada la espina de no haber podido eliminar a Altuna en el Manomanista. (Jon URBE/FOKU)

Jokin Altuna y Joseba Ezkurdia son, por cualidades y por títulos, dos de los máximos aspirantes a entrar en el selecto club de la triple corona, ese que junta a los pocos pelotaris que se han calado las txapelas de las tres principales modalidades. Retegi II, Martínez de Irujo –los dos únicos que lo han conseguido en una sola temporada– Arretxe, Barriola, Aimar Olaizola, Oinatz Bengeoetxea y Urrutikoetxea son los únicos que han logrado este hito al que aspira Joseba Ezkurdia que, sin dos de los últimos campeones en liza, está ante su gran oportunidad de hacerse con esa txapela que le falta, la del Manomanista.

Eso sí, en la que está siendo su novena participación en la distancia, el sorteo le ha vuelto a enfrentar a Jokin Altuna antes de una final a la que, según muchos pronósticos, ambos parecían predispuestos. Y el amezketarra, al que es un Parejas en el que se ve abocado a dar muchas ventajas atrás el titulo que se le atraganta es, junto a Mikel Urrutikoetxea uno de los cinco rivales que le han cortado las alas en ese anhelo.

Su compañero en Aspe le eliminó en las semifinales de 2017 (22-17) y en cuartos del año pasado (22-18), mientras que el de Zaratamo se interpuso en su camino en cuartos de 2016 (22-19), en la misma eliminatoria un año después (22-13) y en semifinales de hace dos temporadas (22-14).

Respeto mutuo

En una elección de material sin ninguna queja por ninguna de las partes, el de Arbizu ha reconocido que el no haber podido superar a Jokin Altuna en un individual en toda la cancha, ya lo ha hecho en dos finales de la jaula, es una espinita que tiene clavada y a la que quisiera dar la vuelta lo antes posible. Eso sí, tiene claro que no lo va a tener nada sencillo.

«Jokin tiene muchas virtudes y por eso está en lo más alto desde que dio el salto a profesionales, yo diría que tanto mano a mano como en el cuatro y medio termina muy fácil el tanto, pero además comete muy pocos errores, te obliga a hacer cada tanto, se agarra al partido y es muy complicado superarle».

El intercambio de halagos suele ser uno de los tópicos más repetidos en estas previas de cualquier deporte y el caso de la pelota no es una excepción, mucho menos cuando los que se enfrentan son dos pelotaris del nivel del de Amezketa y el de Arbizu. Así que Jokin Altuna tampoco ha escondido que su rival el domingo le imprime mucho respeto.

«De Joseba destacaría que muchas veces te parece que le has dado un buen pelotazo, que lo pondrás en dificultades y, de repente, le da una volea desde el cinco y medio o seis con el que te cambia el tanto de raíz. Físicamente es un toro, en la cancha desde cualquier posición le imprime una gran velocidad y eso es lo que le hace verdaderamente peligroso, si no le fuerzas, te toca andar a su ritmo y por eso será muy importante que lleve yo la iniciativa del tanto», ha apuntado el guipuzcoano.

Duelo de sacadores

Antes de esta especie de «final anticipada», el Atanto III donostiarra acogerá un duelo de sacadores entre un Darío que quiere refrendar todo lo bueno mostrado el año pasado y un José Javier Zabaleta que quiere hacer ver que todo lo bueno mostrado ante Arteaga no fue flor de un día o demérito del rival.

Eso sí, el de Etxarren ha querido ponerse la piel de cordero ante el tercer clasificado del año pasado, que eliminó a Irribarria y le puso las cosas muy difíciles a Jokin Altuna. «Yo creo que el favorito es él, el año pasado ya se vio qué clase de pelotari es él, el campeonato que hizo, hasta dónde llegó y quién le eliminó, es un gran pelotari en el Manomanista», ha apuntado. «A ver si podemos darle un susto».

Pero el de Ezcaray no se fía del zaguero y ha tirado de humor al contestarle. «Si empieza a darle, igual necesito una escalera aquí en el siete... Para mí lo principal será meterle ritmo al partido».

Dos amigos abren los cuartos en Idiazabal

Los cuartos de final arrancan el viernes en Idiazabal, uno de los frontones que Aspe utiliza para sus entrenamientos, con el enfrentamiento entre Danel Elezkano y Beñat Rezusta, dos grandes amigos que incluso han llegado a calarse juntos la txapela del Parejas. El de Bergara se presenta tras la buena imagen que ofreció ante Bengoetxea VI y con las ideas claras. «Danel es muy hábil en los cuadros alegres y tratará de enredarme, a ver si puedo sacarlo de cerca del frontis. No debo entrar en su juego, pero sin olvidar terminar cuando tenga oportunidad», ha apuntado.

El de Zaratamo reconoce que el Manomanista no es su distancia pero ha sido competitivo los últimos años, algo que intentará repetir. «Beñat es un gran manomanista, a pesar de ser zaguero se mueve rápido y se defiende de aire, de joven fue delantero».