NAIZ
Altsasu

Desaparece un cuadro que denunciaba en el bar Koxka lo sufrido en el ‘caso Altsasu’

Un cuadro que recordaba y denunciada lo sufrido por ocho jóvenes y el propio pueblo en el ‘caso Altsasu’ ha desaparecido del lugar en el que estaba expuesto: el bar Koxka. Los autores piden ayuda para recuperarlo.

Los autores de la obra ‘In-Defensión/In-Justizia’, Patricia Paats y Joseba Salegi, tratan de recuperar su cuadro, un trabajo que denunciaba lo sufrido por el pueblo en el ‘caso Altsasu’ y que se encontraba colgado en un lugar simbólico en toda aquella historia, el bar Koxka, hasta el pasado 8 de febrero.

Según ha explicado Salegi a NAIZ, el cuadro se realizó en 2019 como parte de la exposición que organizó Artebide Taldea. Aquella exposición giraba en torno al ‘caso Altsasu’ y fue la aportación realizada por Salegi y Paats. «El cuadro representa a los chavales mediante las figuras del frontal de la basílica de Arantzazu, de Oteiza, que refleja el vacío de la tragedia vasca en un conflicto como el vivido por los chavales y su entorno».

Sobre ellos aparece el nombre ‘Altsasu’, «porque el pueblo fue vapuleado», añade.

Obra ‘In-Defensión/In-Justizia’ que ha desaparecido del bar Koxka de Altsasu.

Los autores nunca quisieron vender su trabajo y deseaban «que fuese para el pueblo». Por ello, le propusieron a Josu (dueño del Koxka) colgarlo en el bar, debido a lo que el propio bar sufrió tras los hechos de aquel 15 de octubre de 2016, «como reconocimiento al hecho histórico que les tocó vivir».

Allí se encontraba hasta el pasado 8 de febrero. Salegi considera que desapareció «fruto de una gamberrada, como las que ha habido toda la vida y en todas partes». Un grupo de jóvenes que se encontraban de fiesta en el lugar lo sacaron fuera del bar, después de que se les cayese, según han hecho saber a los autores. Ahí se le pierde la pista.

Llamada de un número oculto

Con el objetivo de recuperarlo, Salegi y Paats publicaron este martes un vídeo en Youtube junto a un texto: «Rogamos encarecidamente a todo el que sepa algo sobre su paradero, nos lo informe», acompañado de un número de teléfono. «Si alguien vio a una persona con un cuadro a las 04:00, que nos llame».

Hasta la fecha tan solo han recibido una llamada, con información poco fiable «y más destinado a despistar, a que dejásemos de buscar, que a ayudar». Aquella llamada se realizó desde un número oculto.

Salegi no pierde la esperanza de recuperar el trabajo y «si Josu quiere» que este vuelva a la pared del Koxka y ayude a mantener la memoria de lo sufrido por el pueblo.